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miércoles, 24 de abril de 2024 00:29h.

Dávila, alcalde de nuevo en Tacoronte, con los votos de la minoría, gracias a las inexplicables medidas cautelares

"El juez Jorge Riestra Sierra concede la suspensión cautelar y repone al censurado alcalde de Tacoronte, contra la opinión del fiscal"

Me quedé atónito, cuando escuché la noticia de esta nueva pirueta saltimbanqui de la política canaria. Aunque era de esperar que el largo brazo de Cc, alargado por el del PsoE, encontraría un juez proclive a sus ideas. Y es muy sospechoso que un juez que no se atreve a dictar una sentencia definitiva, tome la apresurada decisión de montar este desbarajuste en el ayunbtamiento de Tacoronte. Pero lo que dice el juez de lo contencioso administrativo número 4 de Santa Cruz de Tenerife es más que discutible. Desde el punto de vista jurídico y desde el punto de vista del juego democrático. 

En la primera perspectiva, la jurídica, escucho a una opinión autorizada, la de Santiago Pérez, decir en la SER que la medida cautelar no tiene pies ni cabeza. Desde la segunda, la democrática, no me hace falta criterio ajeno para percatarme de que no tiene sentido lo que hace eljuez y, si me apuran, ni siquiera lo que dice la ley antitránsfugas.

Y hay que añadir que, a pesar de las triunfalistas declaraciones de Paulino, de Julio Cruz y de Clavijo, que dan las medidas cautelares como cosa definitiva, queda mucho camino judicial que recorrer. Y, en el fondo, lo más firme: en las próximas elecciones, ni el psoE ni Cc tendrán nada que rascar en Tacoronte. Eso llevaremos ganado. Por cierto, que me encanta escuchar a Paulino diciendo que "las leyes están para cumplirse", Hay qye jeringarse.

No puede discutirse que el meollo de la cuestión, que es si los censurantes eran o no miebors del PsoE, no tiene vuelta de hoja. La medida "fulminante" de expulsión, diga lo que diga el congreso socialista de Sevilla de hace un año, no se sostiene, porque no respeta el inalienable derecho a la defensa. Y los concejales rebeldes ya habían recurrido, por lo que estabansólo  provisionalmente expulsados. Por tanto, no puede aplicarse la aberrante ley anti transfugas.

Y esto nos lleva a la otra dimensión, más importante si cabe: la democrática, esa abracadabrabte ley con la que los partidos hegemónicos pretenden preservar su fortaleza ataca a a la esencia del estado de derecho: el principio de las mayorías. En Tacoronte, hoy, tenemos el mejor ejemplo. En este momento, gracias a esa ley y gracias a una medida cautelar más que sospechosa, en el ayuntamiento de Tacoronte se parapeta un alcalde que dispone de menos de la mitad de los votos de concejales.¿Con qué mojo nos comemos eso?

http://www.diariodeavisos.com/2013/12/juzgado-anula-mocion-censura-tacoronte/

http://www.sanborondon.info/content/view/57610/1/

http://www.laopinion.es/tenerife/2013/12/02/alvaro-davila-recupera-alcaldia-tacoronte/513317.html