Con el partido llamado popular en el poder, ya se sabe. Es lo mismo que con la coalición llamada canaria. O, incluso, con el partido llamado socialista y obrero (cuando le toca, insisto, tocar poder). Aunque el tercero ahora le toca ir desde la oposición y cambia el rollo, a estos tres nefandos partidos, les ecanta primar los intereses de algun empresario, frente a lo que conviene al territorio, al medio ambiente, a la economía general. En definitiva, a lo que conviene a la generalidad de la población. Nada importa, frente al sacrosanto beneficio empresarial, al santificado desarrollo.