NO INCINERACIÓN TENERIFE denuncia otra de las barrabasadas que perpetra, en todos sus niveles, esta administración pública que enti4nde que lo de la defensa ambiental es una cuestión de imagen, de mera propaganda.
Michael Corkery y Somini Sengupta en THE NEW YORK TIMES publican este inquietante reportaje sobre la contaminación del plástico. Y Francisco Morote, de Attac Canarias, que señala la noticia, y yo, Chema Tante, agregamos este dato que aportan EFE / CANARIAS 7: En Canarias, ese mar que nos une al resto del mundo, está sepultado en plástico. Y, para que se note que estoy contra el turismo masivo, solamente diré que solo dos millones personas no pueden generar esa inmundicia plástica. Son los 17 millones que quieren volver a traer, con la irresponsabilidad criminal empresarial y política, quienes tienen la culpa. No tenemos espacio, ni en la tierra ni en la mar, para tal aglomeración humana. Esta faceta del ecocidio lo perpetran empesas, pero los gobiernos, que lo saben, se limitan a establecer pequeños parches a largo plazo, que ni sirven para mucho ni llegan a tiempo.
Somos alumnado del IES Isabel de España de 1º de la ESO C. Estamos realizando una encuesta para la materia de Biología sobre el uso de botellas de plástico en la población de Gran Canaria. La encuesta es anónima y tiene sólo 6 preguntas.
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSdEVL0lG8jmHh_aArvvLS75a17MH9Twm3dzP92FIoEmcZWygw/viewform
Notable artículo de Raúl Vega en TAMAIMOS. Las fogaleras en Ecuador y en Cataluña y el Día por la erradicación de la Pobreza, me distrajeron y no me dejaron ocuparme de este texto. Pero, lamentablemente, el problema que toca Raúl no ha perdido ni vigencia ni gravedad en quince días y todo indica que las va a mantener, crecientemente, mucho tiempo. El desarretado e inconsciente consumo de plástico en el consumo masivo diario tiene unas consecuencias brutales y contribuye a la catástrofe ecológica. Gobiernos y empresas se obsesionan con las bolsas - y hacen bien, aunque no lo bastante- pero siguen impasibles con el envasado, en origen y en los canales, de productos con plástico. Es cierto que existen mecanismos de recogida y reciclado de esta enorme montaña plástica, pero ni es capaz de asumir la gigantesca magnitud del material peligroso y, encima, las masas consumidoras siguen en buena parte arrojando al ambiente el plástico. Una auténtica tribulación. Y hay que clamar por soluciones, como hace Raúl Vega en TAMAIMOS.