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viernes, 26 de abril de 2024 10:00h.

Contra la introducción del gas en Canarias y a favor de un modelo energético no contaminante y sin monopolios

El pasado 6 de marzo el colectivo Ecologistas en Acción de Las Palmas de Gran Canaria organizó en su sede una charla bajo el  título de “El sistema eléctrico canario: El gas y otras amenazas para la implantación de las energías renovables” de la mano del experto en el sector de las nuevas energías José Luis Porta Albelo, que supone el punto de arranque de toda una serie de acciones para reclamar un nuevo modelo energético en el archipiélago que pondrá en marcha la asociación durante el 2015.

Contra la introducción del gas en Canarias y a favor de un modelo energético no contaminante y sin monopolios

El pasado 6 de marzo el colectivo Ecologistas en Acción de Las Palmas de Gran Canaria organizó en su sede una charla bajo el  título de “El sistema eléctrico canario: El gas y otras amenazas para la implantación de las energías renovables” de la mano del experto en el sector de las nuevas energías José Luis Porta Albelo, que supone el punto de arranque de toda una serie de acciones para reclamar un nuevo modelo energético en el archipiélago que pondrá en marcha la asociación durante el 2015.

Esta charla, que ha despertado gran interés y tuvo una muy buena acogida por parte de los asistentes, sirvió de marco para comprender y explicar al gran público cómo funciona la generación, transporte, producción y consumo de electricidad en Canarias y cuáles son las características que explican el actual sobrecoste e ineficiencia del sistema.

El sistema eléctrico canario, tal como explicó José Luis Porta, está conformado por seis sistemas independientes (Lanzarote y Fuerteventura se encuentran interconectados) cuya electricidad se genera en parques de generación centralizados y monopolizados por los derivados del petróleo. Una de las claves de la elevada ineficiencia del modelo actual, donde se pierde en torno a un 40% de la energía que se produce, es que los poderes políticos y económicos han diseñado un modelo que se resisten a abandonar conformado por grandes y caras infraestructuras, con una potencia instalada hiperdimensionada, ajena a los actuales condiciones de madurez tecnológica de energías como la solar o la eólica.

En palabras del ponente “Canarias, pese a presentar una hiperabundacia de recursos renovables, cuenta con una aportación de las renovables al sistema de un escaso 7%, frente a la media de penetración estatal de las energías limpias de un 38%, ya de por sí baja en el contexto europeo”.

La charla sirvió para denunciar la campaña de demonización de las primas a las energías renovables “es precisamente la ayuda pública que reciben los sectores convencionales la que no está permitiendo que las energías limpias compitan en el mercado en condiciones de igualdad” sostenía el ponente.


Un sistema distribuido

La única manera de reducir los costes en el sistema es apostar por las renovables y desechar la introducción del gas y los proyectos de regasificadoras, un recurso que seguirá alimentando nuestro sobrecoste y nuestra dependencia del exterior. Pero no sólo se trata de una cuestión de cambio tecnológico, requiere también luchar contra el monopolio de las grandes eléctricas como Endesa que mientras intentan seguir protegiendo su control del sector, van invirtiendo en proyectos de renovables manteniendo sus lógicas convencionales de centralización y  falta de participación social para salvaguardar sus intereses.

En este sentido, la organización Ecologistas en Acción de Las Palmas de Gran Canaria, como parte de la Federación Ben Magec- Ecologistas en Acción, continuará exigiendo un modelo distribuido donde no existan grandes nodos centrales, donde quepan los pequeños productores y el autoconsumo, como único camino para racionalizar el sistema, hacerlo más justo social y medioambientalmente y eliminar los sobrecostes, con el objetivo de que Canarias pueda desarrollar su enorme potencialidad como laboratorio mundial para energías como la solar, geotérmica, eólica o maremotriz. Un sistema que incentive además la eficiencia y que esté orientado hacia el ahorro y el consumo responsable de la energía, convirtiéndonos también en referentes en la lucha contra el cambio climático.