NC afirma que el cierre “programado” del ITC es una responsabilidad “exclusiva” del Gobierno canario

Román Rodríguez denuncia una estrategia de tintes insularistas ya que más de la mitad de los recursos de la empresa  pública de I+D+i están en Gran Canaria

El presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, afirmó hoy que el cierre “programado” del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) es una responsabilidad “exclusiva” de la dirección de esta empresa pública y del Gobierno de CC y PSOE. Román Rodríguez denunció que esta maniobra de liquidación responde a criterios de tintes insularistas relacionados con que, más de la mitad de los recursos de la única empresa pública de ámbito canario en Investigación, Desarrollo e innovación (I+D+i), están en Gran Canaria. El líder de NC rechazó el modelo de una Canarias que abandona las actividades vinculadas a la I+D+i  mientras retoma, con la ley del suelo, la cultura del cemento y el desarrollismo fracasado.

Román Rodríguez hizo hincapié en la decisión que, el próximo lunes, tomará la plantilla del ITC sometida al “chantaje” del cierre. A la espera de conocer el resultado sobre la propuesta del gerente, Gabriel Megías, para asumir “otra” rebaja salarial, en este caso del 17% anual, como “única” vía para frenar el expediente de disolución; Román Rodríguez recodó que los trabajadores “han asumido, hasta ahora, un sacrificio muy superior” al resto del sector público,   en términos salariales como por la pérdida de más del  33 por ciento de la plantilla.

El responsable “único” de la situación, para NC, es el Ejecutivo canario. Para llegar hasta aquí, prosiguió Rodríguez, hay una estrategia “premeditada” que responde a las decisiones de reducir sus presupuestos desde 2009, de tener una baja ejecución de los mismos, de despedir e incentivar la marcha del personal científico, de renunciar a los beneficios en otras empresas públicas participadas, como el ITER; de endosar a la cuenta de la empresa los 2,3 millones de euros por el varapalo del Constitucional en materia laboral y de negarse a inyectar fondos públicos, como hace con el 80% de las empresas públicas del Ejecutivo, que “también serán inviables si se aplican las mismas recetas” que al ITC.

“Perder la única empresa pública de ámbito canario en I+D+i es un lujo que Canarias no se puede permitir y en la que creemos que subsisten criterios  de tintes insularistas porque más de la mitad de sus recursos están en Gran Canaria,” denunció el presidente de NC. La responsabilidad directa, en su opinión, está en el consejo de administración y los gerentes. La autoría intelectual, añadió, en la Consejería de Hacienda y la “última” responsabilidad, especificó, en el Gobierno canario, “en pleno.”

Tras reiterar que NC rechaza que la viabilidad de esta entidad pase “exclusivamente” por “nuevas” reducciones salariales de sus 150 trabajadores, en calidad de portavoz parlamentario de NC recriminó al Ejecutivo de CC y PSOE que “siga sin respetar” el último mandato “unánime” del Parlamento. La propuesta de la gerencia, para Román Rodríguez, “no guarda un equilibrio, como dice el acuerdo parlamentario, entre la sostenibilidad del empleo público, la viabilidad económica de la entidad y la búsqueda de nuevas vías de financiación”.

El máximo responsable de NC rechazó con rotundidad el modelo diseñado para Canarias por el presidente, Fernando Clavijo. “Nos conduce, de nuevo, al fracasado modelo desarrollista” de los años 80 del siglo pasado, a la cultura del cemento que impregna la ley del suelo, mientras abandona las actividades vinculadas con la I+D+i, tal y como advirtió.