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lunes, 29 de abril de 2024 11:19h.

Podemos exige al Gobierno canario que entregue las viviendas de Jinámar que adjudicó en marzo

Las 57 familias afectadas no pueden matricular a sus hijos en los centros educativos hasta que les entreguen las casas y puedan empadronarse. La construcción de las viviendas finalizó hace tres años, en 2012

Podemos exige al Gobierno canario que entregue las viviendas de Jinámar que adjudicó en marzo

  • Las 57 familias afectadas no pueden matricular a sus hijos en los centros educativos hasta que les entreguen las casas y puedan empadronarse
  • La construcción de las viviendas finalizó hace tres años, en 2012

Podemos exige al Gobierno de Canarias que agilice la entrega de las viviendas de Jinámar (Gran Canaria) que adjudicó desde el pasado mes de marzo. Noemí Santana, portavoz del grupo parlamentario, aseguró que su formación “pedirá explicaciones a las responsables del área y tramitará las medidas parlamentarias pertinentes” para que se resuelva con urgencia la problemática a estas 57 familias y puedan ejercer su legítimo derecho a la vivienda.

El pasado mes de marzo, el Gobierno de Canarias procedió al sorteo de viviendas sociales en los barrios de Las Torres y Jinámar de la capital grancanaria. Las familias de Las Torres, que ejercieron presión en los medios de comunicación durante el pasado período electoral, recibieron las llaves de sus casas en julio. Las de Jinámar continúan a la espera.

Familias adjudicatarias de Jinámar se reunieron este martes con Noemí Santana, a quien expresaron su malestar por la excesiva demora en la entrega de unas viviendas que terminaron de construirse en 2012. Manifestaron también su preocupación por la imposibilidad de matricular a sus hijos en los centros escolares de la zona en la que residirán el próximo curso. Para ese trámite es imprescindible el empadronamiento, que no pueden formalizar hasta haberse instalado efectivamente en sus nuevas casas.

Las familias afectadas se quejan de la escasa información que facilita la Administración autonómica, en un procedimiento que se ha dilatado al extremo de mantener las viviendas acabadas y vacías durante tres años sin que aún puedan entrar a habitarlas. A sus numerosas consultas, aseguran que solo han recibido “largas y silencios por respuesta.” Lamentan que solo les escuchen cuando acuden a medios de comunicación o a partidos de la oposición, y se les ignore cuando se presentan en las oficinas públicas a recabar información sobre sus derechos ciudadanos.

Recientemente, el Instituto Canario de la Vivienda ha llamado a algunas de las familias para firmar documentación y ser informadas de la vivienda concreta que les será entregada. La experiencia de Las Torres les dice que entre estas citas y la entrega efectiva pueden pasar más de dos meses, por lo que temen que no se instalen en sus nuevas casas hasta avanzado el curso escolar. Entre otras cuestiones, la Administración les exige que previamente constituyan la comunidad de propietarios, otra traba que demorará aún más el acceso a su derecho a la vivienda.

Noemí Santana, con representantes de familias adjudicatarias de viviendas en Jinámar (Gran Canaria)