Buscar
viernes, 26 de abril de 2024 10:00h.

De realismos y otras hierbas (para don Bruno Perera) - por Carlos Sánchez Ortega

Se dice por Venezuela aquello de "Cachicamo llamando a Morrocoy conchudo", como si se les hubiese ocurrido leyendo este escrito de don Bruno.

Se dice por Venezuela aquello de "Cachicamo llamando a Morrocoy conchudo" (*), como si se les hubiese ocurrido leyendo este escrito de don Bruno. El Sr. Perera (don Bruno) pide REALISMO a Mr. San Ginés (se supone que debe ser algo más que un político lanzaroteño porque va en plural) al tiempo que mantiene (y al parecer, reiteradamente) que, al grito de “al río, que estamos perdidos”, hay que pedir un 30% de los beneficios NETOS del crudo y del gas y la construcción de 2 refinerías en suelo canario y la contratación de diverso personal, sobreentendiendo que se trata de desempleados canarios,

¡Claro está! No voy a plantear dudas hamletianas de los beneficios ecológicos sostenibles de, una vez en vías de liberarnos de la contaminación de la Refinería de CEPSA en S/C de Tenerife y en el apogeo de los follones de las gasificadoras, montarnos en el fregado de DOS refinerías (¿Gran Canaria y Tenerife o Lanzarote y Fuerteventura? ¿Por qué dos?).

Tampoco quiero cuestionarme cuál ha de ser el número de horas de los cursos del Servicio Canario de Empleo para que menos de 400.000 parados obtengan la formación suficiente y necesaria para cubrir los escasos y muy especializados puestos de trabajo de las plataformas petrolíferas, ni los más numerosos que puedan derivarse de la construcción y puesta en funcionamiento de refinerías a pares, petroleros para trasvases y transporte internacional, muelles en los entornos de las refinerías, servicios de emergencia anticontaminación, policía antidisturbios para disolver manifestaciones de ecologistas, Tribunales de Orden Público, etcétera.

Sólo me centraré en lo del REALISMO, ese término que según sea su acepción, puede ser lo que es (tal cual), la imitación fiel de la naturaleza, la afirmación de la existencia objetiva; el mágico de los escritores latinoamericanos Rulfo, Gabo y demás; o el relativo a las monarquías. A fe que no resulta fácil.

Parece que lo que se pretende es que se habla de aceptar las cosas como son, pero cuando se llega a lo supuestamente negociable (porcentajes de beneficios NETOS, creaciones de complejos industriales y toda esa parafernalia) entramos en el mundo de la ficción mágica. Pero tampoco vale la literatura latinoamericana, porque el paisaje en el que se desarrolla se corresponde más con la literatura orwelliana. ¿Se trata acaso de un realismo relativo a la monarquía?

Tal vez sea eso. Tal vez lo que pide don Bruno a los o las “Mr. San Ginés” que arrayan millos sea que se conviertan en monárquicos de pro. ¿De qué monarquía, de la española? No se define con claridad, pero por el cariz de la carta de peticiones, no debe ser de la española. Me temo que se refiere a la monarquía de los Reyes Magos de Oriente. Esperemos hasta el 6 de enero para ver si se queja o no.


(*) Sobre la frase venezolana:

http://www.venezuelatuya.com/refranes/cachicamo_diciendole.htm