Porque el gran problema está en el tremendo diferencial entre los precios de origen y de consumo. Y las condiciones de extorión que le aplican los asentadores e intermediarios a los agricultores y agricultoras.

Oscar, el tipo amable que lleva la tienda de ECONOMATO CANARIO en la calle Murga, en Las Palmas de Gran Canaria, me cuenta esto, que le había pasado ese mismo día: "Llevamos un camión de calabacín a Mercalaspalmas. Nos lo compraron, a diez céntimos el kilo. Todavía no lo habíamos terminado de descargar, cuando ya lo habían vendido, diez veces más caro. Y lo cobraron, claro, al contado. Pero a nosotros nos lo pagan a noventa días,,,

En esas condiciones, es imposible que el sector primario canario salga adelante. Y no se trata simplemente, que también, del problema de una gente campesina escachada por un trato comercial abusador; no se trata, aunque también, de que de esta manera muchas personas que se sienten atraidas por la actividad agricultora se sienten defraudadas cuando, después de un trabajo tremendo se acercan a la cadena de distribución y ven que les pagan una miseria por unos productos que luego comprueban que llegan al consumo tres y cuatro y más veces más caro; ni siquiera, y también, de que las familias canarias y el turismo consume un producto que a lo mejor lleva un fuerte número de días en una cámara y ha perdido buena parte de sus condiciones y de su valor nutritivo... es que de esta manera no coneguiremos jamás liberarnos de nuestra demencial dependencia alimentaria del exterior.

Por eso, ante la desaprensiva indiferencia del gobierno de Paulino hacia lo que está pasando; ante el fracaso estrepitoso de la empresa que debe ocuparse de estos asuntos, GMR de Canarias, creo que la solución está en los agricultores y las agricultoras, que deben tomar el control de la distribución de sus productos, y en la gente que compramos, que tenemos que apoyar estas iniciativas.

Es lo que hacen en ECONOMATO CANARIO, que no es el único proyecto. Pero que lo tomo como ejemplo de los todavía pocos que hay, y que deben proliferar. Y a todos los tenemos que ayudar y alentar. Comprando en las organizaciones campesinas y en los mercados de agricultores, nos beneficiamos y colaboramos para conseguir la soberanía alimentaria, que nunca debimos perder.

http://www.economatocanario.com/