Buscar
domingo, 28 de abril de 2024 00:00h.

Sus ganancias nos empobrecen - por Eduardo Madroñal Pedraza en La casa de mi tía, Las indecentes ganancias de la banca, comenta Antonio Aguado

 

fr aas em
Antonio Aguado, coherente veterano militante socialista, señala y comenta el artículo de Eduardo Madroñal

Sus ganancias nos empobrecen - por Eduardo Madroñal Pedraza en La casa de mi tía

https://www.lacasademitia.es/articulo/economia/ganancias-nos-empobrecen-eduardo-madronal-pedraza/20230801102908142244.html

 
Las indecentes ganancias de la banca, comenta Antonio Aguado
ANTONIO AGUADO
ANTONIO AGUADO

La crisis tan grande que estamos padeciendo debido a la microeconomía que, es la que nos afecta directamente con el incremento de precios de los productos de primera necesidad, como consecuencia de la inflación subyacente en el mes pasado del 6,2%, producida en gran medida por la Guerra de Ucrania, que burdamente trataron de convencernos de que, por las medidas de embargo a las que iba a ser sometida Rusia, le iba a afectar gravemente y no tendría más remedio que desistir en seguir atacando al pueblo ucraniano.

El caso es que, ese objetivo trazado por Estados Unidos con su OTAN y sus satélites países de la Unión Europea, no ha dado resultado y más bien, el embargo ha venido ocurriendo pero en sentido contrario, tal y como se ha venido comprobando con el incremento, y la carestía de la vida en los países europeos.  

Pero lo inconcebible es que a las grandes empresas del Ibex 35, nada de esto le viene afectando y continúan con sus grandes beneficios, como es el caso de las entidades bancarias que, han visto exponencialmente incrementar sus ganancias en lo que llevamos de año los seis principales bancos: Santander, BBVA, Caixabank, Bankinter, Sabadell y Unicaja. Sus beneficios en el primer semestre de este año, ha sido de 12.386 millones de euros, que supone un 20,2% más que en 2022.

Esto demuestra que el impuesto a la banca ha sido todo un fiasco, pues al final ha venido recayendo en sus clientes, mediante el incremento impunemente de los créditos bancarios, de las comisiones por transferencias y otras transacciones, no retribución de intereses por el dinero depositado, etc.

Las hipotecas para las adquisiciones de viviendas familiares, se han venido incrementando cada vez más y en muchos casos, debido a la imposibilidad de hacerle frente al pago, ese bien tan preciado es requisado y lo más lógico y justo es que, si se produce ese embargo a favor de la entidad bancaria, la hipoteca debería resarcirse con la dación de la vivienda en pago. Sin embargo, injustamente eso no es así y las personas afectadas tienen que seguir haciéndole frente a esa ya, hipotética e injusta deuda. 

Para acabar con la extorsión y arbitrariedad de la banca privada, necesitamos a una pública que le haga la competencia y como banca del Estado nos represente. Inexplicablemente esta lógica medida no se ha llevado a efecto, aún teniendo todo a favor, debido a que para rescatar a las antiguas cajas de ahorros el Estado invirtió más de 60.000 millones de euros que el “desconocido” M. Rajoy, siendo presidente del gobierno ostentosamente expuso que, ese dinero sería recuperado, cosa que no ha ocurrido salvo en sólo 3.500 millones del total. 

Con la creación de Bankia se tuvo la gran oportunidad, de haberse creado la tan ansiada banca pública. Sin embargo, eso no ha ocurrido y nos vemos impotentes ante los desmanes que vienen protagonizando los bancos privados. 

La creación de una banca publica y otra energética estatal que, le haga frente al oligopolio existente en este sector tan básico y esencial, que imponen los precios abusivamente, son asignaturas pendientes que sin duda, de llevarse a efecto, redundarán positivamente en los servicios y el nivel de vida de la mayoría social y sobre todo de las personas humildes que más lo necesitan. 

 

Antonio Aguado Suárez 

 

 

mancheta junio 23