Italia no se arrepentirá de abandonar el BRI: GLOBAL TIMES

El ministro de Defensa italiano, Guido Crosetto, dijo recientemente en una entrevista que el gobierno anterior tomó una decisión "improvisada y atroz" cuando se unió a la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) propuesta por China. El tema hoy es, dijo, cómo caminar de regreso (desde el BRI) sin dañar las relaciones (con Beijing).

Este es el mensaje más fuerte enviado por un ministro del gabinete del actual gobierno italiano desde que surgieron las especulaciones de que Italia podría no renovar el MOU BRI entre China e Italia. Sin embargo, debe señalarse que es anormal que un ministro de defensa haga tales comentarios.

Es de todos conocido que el BRI es un marco de cooperación económica regional, que nada tiene que ver con la defensa nacional. Para evaluar sus logros reales, debe ser el departamento de comercio exterior, el departamento de desarrollo económico o incluso el departamento de tesorería los que estén calificados. Como Ministro de Defensa italiano, Crosetto es inapropiado para tomar la iniciativa de "explotar" la cooperación económica de Italia con China, incluso solo desde la perspectiva de su posición, y su declaración también es seriamente inconsistente con los hechos.

Por ejemplo, dijo que el BRI multiplicó las exportaciones de China a Italia pero no tuvo el mismo efecto en las exportaciones italianas a China. Pero, de hecho, durante más de cuatro años, el volumen de comercio bilateral entre China e Italia ha alcanzado repetidamente nuevos máximos. De 2019 a 2022, aumentó casi un 42 por ciento en contra de la tendencia. El año pasado, alcanzó casi $ 78 mil millones. De 2019 a 2021, las exportaciones de Italia a China aumentaron un 42 por ciento. En los primeros cinco meses de este año, las exportaciones de Italia a China aumentaron significativamente en un 58 por ciento. Estas cifras reflejan irrefutablemente el fuerte efecto del BRI, que no es lo que dijo Crosetto en absoluto.

Sin embargo, por otro lado, aunque la declaración del ministro de Defensa italiano es muy torpe, parece "normal" en el entorno político actual en EE.UU. y Europa. En términos de cooperación económica con China, a menudo son los funcionarios de seguridad y defensa los que tienen la actitud más radical, mientras que los funcionarios que están realmente a cargo de la economía parecen ser mucho más "moderados". Esto muestra exactamente cuán serios son los problemas de seguridad de EE. UU. y Occidente. Crosetto es solo el último ejemplo.

Además, el momento de la retórica de Crosetto también es dudoso, y Estados Unidos obviamente está detrás de ella. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, acaba de concluir su visita a Estados Unidos. Ha habido especulaciones de que Meloni podría retirarse del BRI para mostrar lealtad a los EE. UU., pero luego se demostró que no era cierto. Pero después de reunirse con el presidente estadounidense, Joe Biden, Meloni dijo que el gobierno italiano tomará una decisión sobre el BRI antes de diciembre, enfatizando "mantener abierto un diálogo constructivo con Beijing" y revelando su disposición a visitar China. Esto también refleja el dilema actual de Italia: quiere el reconocimiento político de Washington, pero no está dispuesto a renunciar a la cooperación económica con China y no quiere elegir solo uno.

Está claro quién es responsable de la difícil situación actual de Italia. Desde que decidió unirse al BRI en 2019, EE. UU. ha ejercido una fuerte presión sobre él y casi ha etiquetado a Italia como un "traidor de Occidente". En ese momento, el New York Times incluso describió a Italia como un "Caballo de Troya" del mundo occidental, "permitiendo que la expansión económica, y potencialmente militar y política, de China llegara al corazón de Europa". Tras el cambio de gobierno italiano, Washington vio una oportunidad y aumentó la presión. Justo antes de la visita de Meloni a EE. UU., John Kirby, director de comunicaciones estratégicas del Consejo de Seguridad Nacional, "educaba" públicamente a Italia sobre "la falta de recompensa por las asociaciones económicas con China" y decía que "hemos creado una alternativa".

Esta sí que es una escena intrigante. Mientras EE. UU. y Occidente exageran la vigilancia contra el BRI, también han lanzado "imitaciones" del BRI, como la Asociación para la Infraestructura e Inversión Global del G7 y la Iniciativa Global Gateway de la Unión Europea. La imitación es la forma más sincera de adulación, dijo Kishore Mahbubani, un exdiplomático que se desempeñó como representante permanente de Singapur ante las Naciones Unidas. Estados Unidos y Occidente aprenden e imitan el BRI mientras lo reprimen y difaman, lo que demuestra aún más que el BRI se presentó con una visión a largo plazo y en línea con la tendencia general de la época. A diferencia del multilateralismo defendido por el BRI, la historia ha dado respuestas una y otra vez sobre qué papel pueden jugar las "imitaciones" basadas en la geopolítica y la hegemonía. 

Como el único país del G7 que ha firmado el memorando de entendimiento sobre la Franja y la Ruta, la prioridad de Italia en las relaciones exteriores de China y el estado de las relaciones entre China e Italia en las relaciones entre China y la UE han mejorado significativamente, lo que ha tenido muchos efectos positivos directos e indirectos. También coloca a Italia en una posición única y ventajosa para conectar Oriente y Occidente. Si solo lo vemos desde un punto de vista pragmático y puramente desde los intereses nacionales de Italia, unirse al BRI es sin duda beneficioso. Pero si se mezcla con la geopolítica y la presión y coerción de EEUU, la cosa se complicará. Esperamos que Italia pueda tomar una decisión racional sin interferencias externas. Este es el momento de poner a prueba la sabiduría política y la autonomía diplomática de Italia.

* Gracias a GLOBAL TIMES y a la colaboración de Federico Aguilera Klink

https://www.globaltimes.cn/page/202308/1295423.shtml