Los del Partido Popular se creen los amos, dueños y señores del corral

Erasmo Quintana *

La espesa flema facha del Partido Popular la pone de manifiesto en casi todo lo que hace. Ahí tenemos que son los primeros en querer obligar al PSOE a que cumpla la Ley, mientras ellos son los primeros en saltársela, y ahí están: todo lo que al PP no le interesa de la Constitución y nuestra Democracia se lo pasa por el forro con una avilantez y caradura dignas de mejor causa. Estos conservadores siempre se han saltado la Ley porque se sienten muy por encima de ella. Cinco años llevan incumpliéndola en la obligada y preceptiva renovación de los vocales del CGPJ. Con esta martingala carota llevan los jueces de su cuerda diez años sentadas sus respetables posaderas en aquellos mullidos sillones, ganando unos emolumentos que por ley ya no les pertenece. Si llegan a ser los del PSOE quienes están en esos lugares, ni les digo: juntan Roma con Santiago y removerían todos los demonios. Ahora, son los del PP los que desobedecen la Ley, y aquí no pasa nada: todo de lo más natural.

Una vez aquella alternancia ha desaparecido, son los del PP los que se saltan la Ley, y es natural porque ellos sí pueden hacerlo, que aunque en la oposición, son los que siempre mandan. Cuando reinaba la alternancia entre los dos partidos mayoritarios, el PP estaba encantado con la fórmula de elección de los jueces; era lo adecuado. Ahora que aquella alternancia ha desaparecido, de forma tramposa ya no quiere renovar porque pierde la mayoría que alcanzó con Mariano Rajoy. El sistema ya no les gusta y, sibilina e hipócritamente, dice que son los jueces quienes deben elegirse entre ellos. ¡Manda narices! Esto lo pueden hacer los conservadores del PP, pero ¿se imaginan que fueran los del PSOE quienes hacen de tahúres del Mississippi? Habría manifestaciones populosas en las calles, como las que estamos viendo. En definitiva, el PP sí puede estar en contra de la Ley Constitucional, y el PSOE, ni se atreva. Le caería la caterva de demonios fachas encima y un escarnio popular bien manipulado: el imperio de la Ley es para la izquierda, y para la derecha, una bagatela. Continuamos viviendo en la España secular de la intolerancia, del palo y tentetieso. 

En el actual comportamiento del PP -siguiendo el manual de VOX- hay una insidia furibunda bastante insoportable. Pero lo peor es ese despertar del odio a todo lo que venga de las izquierdas, cuya anomalía cunde en la masa inmensa, desprevenida y fanática, cosa que podemos ver en esas interminables manifestaciones callejeras. Cuando el sistema de renovación de los vocales del CGPJ le beneficiaba al PP, todo estaba bien como hemos dicho, y ahora el mismo sistema ya no le vale: deben ser los jueces quienes se nombren entre ellos mismos. Obligado es insistir una vez más referirnos a algo que ya es cansino. Esta permanencia torticera de cinco años sin querer renovar los vocales del órgano superior de la Justicia, a quien únicamente beneficia es al PP, que conserva ilegalmente aquella mayoría de miembros, con lo que sujeta y embrida la acción natural de la Justicia en su favor, y con lo que ha podido mantener esa cantidad de asuntos delictivos pendientes, cometidos con la trampa a la luz del día. Y, ¿es legal todo ese dinero que han cobrado, con fraude de ley, los vocales del PP?

Luego, otra cosa curiosa: esa inmensa mayoría de gente que va ciega con ese partido de lo más egoísta y corrupto, ¿admiten los comportamientos delictivos del PP, que son de dominio público? Es una aberración lo que hacen a la luz del día -sin esconderse- y extraña sobremanera que esté apática esa masa seguidora, y luego vean con lupa la mínima mota de polvo en los partidos de izquierda, que son los que les están resolviendo -como pueden- la vida a los que menos tienen de nuestra sociedad injustamente maltratada. ¿Significa que tenemos un pueblo, ese que en gran mayoría cuenta con lo comido por lo servido y, sin embargo, comulga con los postulados de la derecha y extremaderecha? Qué aceptación corderil de lo que está mal es la de los españoles...

Esta semana fue la celebración del 45º Aniversario de la Carta Magna, a la que no asistieron ni VOX ni los partidos independentistas y soberanistas, PNV, EH Bildu, ERC, Junts y BNG.

El acontecimiento ha coincidido con que Podemos se separa de Sumar, yéndose al Grupo Mixto, y a Yolanda Díaz no se le ha ocurrido otra cosa que preguntarle a Podemos (al cual ella le debe todo y donde está), que tiene que dar explicaciones de lo que acaban de hacer. Es decir, que arrincona a los de Podemos, dejándolos sin voz, anulándolos por completo, y éstos tienen que darle a ella explicaciones de por qué se han ido. ¿A quién engaña? No cabe mayor simpleza.

Insistimos: el Partido Popular ha maniatado a la Justicia en España 22 de los últimos 27 años merced a los bloqueos sobre el Poder Judicial. Qué bien hecho, ¿no? Se cumplen cinco años con el mandato caducado de los vocales del PP, por lo que están ahí de forma ilegal, fraudulenta e incurriendo en lo más grave: haciendo nuevos nombramientos. Por cierto, ¿éstos son válidos? Para el PP, que da muestras de corrupto, al parecer, sí.

* Gracias a Erasmo Quintana