Putin hizo "todo lo posible" para lograr la paz, dice Oleksandr Chalyi un veterano diplomático ucraniano - por Aaron Maté
Federico Aguilera Klink y Chema Tante señalan este texto y dicen "Lo que le faltaba a los que odian a Putin...como Urtasun, de Sumar, o Sanchez, del PSOE. Al final terminará por saberse la verdad. Esa no ha sido la Guerra de Putin, sino la Guerra de EEUU, como siempre"
Putin hizo "todo lo posible" para lograr la paz, dice Oleksandr Chalyi un veterano diplomático ucraniano
Aaron Maté *
Surge nueva evidencia de que la administración Biden bloqueó un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania en abril de 2022 y rechazó más propuestas del Kremlin en el período posterior.
En julio pasado, justo cuando las fuerzas ucranianas estaban sufriendo pérdidas “ asombrosas ” en una contraofensiva a la que Estados Unidos las empujó , el secretario de Estado Antony Blinken insistió en que la diplomacia con Rusia no era una opción.
“Si viéramos alguna evidencia de que Rusia está interesada en tener conversaciones de paz significativas, seríamos los primeros en aprovecharla”, dijo Blinken en el Foro de Seguridad de Aspen. "Desafortunadamente, no veo ninguna evidencia de que Rusia esté interesada".
Blinken había repetido esa línea varias veces durante el año anterior. “Todo indica que, lejos de estar dispuesto a participar en una diplomacia significativa, el presidente Putin continúa presionando en la dirección opuesta”, dijo en octubre de 2022. “El problema es este”, explicó Blinken a principios de julio de 2022. “Vemos No hay señales de que Rusia esté preparada para participar en una diplomacia significativa”.
El hecho de que Blinken no viera señales de “diplomacia significativa” por parte de Rusia fue un acto de ceguera deliberada. Como reveló el Washington Post ese mismo mes, desde la invasión, Blinken había “mantenido la misma postura hacia Moscú: no involucrarse”. En consecuencia, Tom Shannon, un alto funcionario retirado del Departamento de Estado, recordó cortésmente al jefe diplomático de la nación que para ver una señal, primero hay que abrir los ojos. "El primer paso es abrir canales de comunicación donde puedas medir lo que busca tu adversario", dijo Shannon. "No puedes saberlo a menos que lo intentes".
Blinken no quiso intentarlo, porque su administración socavó todo signo de diplomacia significativa antes y después de la invasión rusa. En diciembre de 2021, Rusia presentó proyectos de tratado detallados que Estados Unidos y la OTAN pronto rechazaron. Después de que las fuerzas rusas atacaron Ucrania el 24 de febrero, las dos partes mantuvieron conversaciones inmediatamente, que culminaron en un acuerdo de abril de 2022 negociado en Estambul. Pero según múltiples fuentes, Estados Unidos y el Reino Unido lo sabotearon.
Ahora han surgido más pruebas de que la administración Biden socavó el acuerdo de paz con Turquía en abril de 2022, así como oportunidades diplomáticas adicionales en el período posterior.
Un veterano diplomático ucraniano que formó parte de la delegación de Kiev en Estambul, el embajador Oleksandr Chalyi es el último informante que confirma que allí se llegó a un acuerdo. En un acto público en Ginebra , Chalyi recordó que “estábamos muy cerca” de poner fin a “nuestra guerra con algún acuerdo pacífico”. Putin, subrayó, “trató de hacer todo lo posible para concluir [un] acuerdo con Ucrania” y “realmente quería llegar a algún acuerdo pacífico”. Y en Estambul, las dos partes “lograron llegar a un compromiso muy real”.
Sin embargo, “por algunas razones”, añadió Chalyi, ese compromiso “fue pospuesto”. Aunque no dio más detalles, esas razones no son oscuras. Como revelaron inicialmente fuentes del gobierno ucraniano y varias personas han confirmado , Estados Unidos y el Reino Unido se opusieron al acuerdo y se negaron a darle a Ucrania las garantías de seguridad que necesitaba. Según Davyd Arakhamia, jefe de la delegación de Ucrania en Turquía , el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, informó a Kiev que “no firmaremos nada con ellos en absoluto y simplemente luchemos”. La misiva de Johnson era una orden conjunta de Estados Unidos y el Reino Unido para que Ucrania abandonara el acuerdo de paz y "luchara" contra Rusia en su nombre. Por ceder a esta exigencia, Kiev recibió una nueva y masiva inyección de armamento de la OTAN... y un número incalculable de vidas perdidas.
A pesar de la importancia del saboteado acuerdo de paz de Estambul y de la corroboración de alto nivel del mismo, ningún medio de comunicación estadounidense ha informado sobre ello. El motivo no es difícil de discernir: para justificar la continuación de la guerra por poderes en Ucrania, la administración Biden y sus aliados en los medios deben sostener una narrativa que retrate a Rusia como un actor recalcitrante y beligerante que rechaza cualquier ajuste razonable. En consecuencia, la oportunidad diplomática más concreta y significativa hasta la fecha debe ocultarse al público que paga la factura.
Si bien los medios de comunicación estadounidenses han hecho un efectivo juramento de silencio sobre el perdido acuerdo de paz de Estambul de abril de 2022, una propuesta diplomática de Rusia ignorada más recientemente ha atravesado el cortafuegos.
Según funcionarios estadounidenses entrevistados por el New York Times , Putin “envió sondas para un acuerdo de alto el fuego... en el otoño de 2022”. Tras las importantes pérdidas rusas en las regiones de Kharkiv y Kherson, en el noreste de Ucrania, “Putin indicó que estaba satisfecho con el territorio capturado por Rusia y que estaba listo para un armisticio”, dijeron estos funcionarios. El presidente ruso hizo otro intento de acercamiento en septiembre pasado, indicando a través de intermediarios que “está listo para llegar a un acuerdo”. Según ex altos funcionarios rusos y homólogos estadounidenses que se han comunicado con los enviados de Putin, Putin "está abierto a un alto el fuego que congele los combates según las líneas actuales", una postura que está "muy por debajo" de las afirmaciones de Estados Unidos que alberga " ambiciones de dominar Ucrania”.
La propuesta de Rusia para el otoño de 2022, de la que no se había informado anteriormente, ilumina nuevamente otra iniciativa diplomática ignorada durante ese mismo período. En noviembre de 2022, el principal oficial militar estadounidense, el general Mark Milley, abandonó la Casa Blanca para pedir públicamente negociaciones directas con Rusia . Milley argumentó que Ucrania había llegado tan lejos como pudo en el campo de batalla y debería consolidar sus logros en la mesa de negociaciones. Visto en retrospectiva, es plausible que Milley también estuviera respondiendo al acercamiento ruso recientemente revelado por el Times.
Después de ignorar los llamados de la diplomacia no solo de Moscú sino del principal oficial militar de Estados Unidos, la administración Biden empujó a Ucrania a la desastrosa contraofensiva del verano pasado. Esa operación fue tal fracaso que Rusia “conquistó más tierra en 2023 de la que perdió”, según un nuevo estudio del Ministerio de Defensa de Estonia.
Recapitulando un relato reciente del Washington Post sobre las luchas de la contraofensiva, la “parte más dolorosa”, comenta el columnista del Post David Ignatius , “fue su descripción de cómo los altos funcionarios estadounidenses anticiparon que Ucrania probablemente fracasaría, pero aun así alentaron a que la campaña siguiera adelante”. Sin embargo, esta realidad “dolorosa” no es una revelación post facto. Como supimos de las filtraciones de inteligencia de Estados Unidos semanas antes de que comenzara la contraofensiva, la administración Biden alentó a Ucrania a lanzar la contraofensiva a pesar de pronosticar en privado que se quedaría “muy corta”.
Mirando retrospectivamente ese período, el director de la CIA, William J. Burns, recordó al Post: “Pudimos ver [a los rusos] construyendo defensas fijas realmente formidables, difíciles de penetrar, realmente costosas y realmente sangrientas para los ucranianos”. Pero, aun así, como explicó el secretario de Defensa, Lloyd Austin: “Mi opinión es que no tenían otra opción”.
Kiev no tuvo otra opción porque su principal patrocinador en Washington tomó la decisión de bloquear todas las oportunidades para una paz negociada y obligar a más ucranianos a morir. De cara a 2024, ese parece seguir siendo el plan. A pesar de las recientes señales de que la Casa Blanca está nuevamente interesada en la diplomacia, un funcionario del Congreso familiarizado con el pensamiento de la Casa Blanca explicó a Politico que es poco probable que se produzca un cambio significativo. “Esas discusiones [sobre las conversaciones de paz] están comenzando, pero [la administración] no puede dar marcha atrás públicamente debido al riesgo político” para el presidente Biden.
En consecuencia, la Casa Blanca está “impulsando una estrategia conservadora que se centre en mantener el territorio que tiene Ucrania, excavando y acumulando suministros y fuerzas a lo largo del año”, informa el New York Times. En otras palabras, en lugar de poner fin a la guerra, la administración Biden quiere congelar el conflicto para que Ucrania pueda resistir hasta las elecciones estadounidenses de noviembre de 2024.
La estrategia de Biden para prolongar la guerra depende de que el Congreso autorice su nueva solicitud de presupuesto de 60.000 millones de dólares. Sin esa nueva inyección de armamento estadounidense, advirtió el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, “perderemos”.
Pase lo que pase a continuación, ahora está fuera de toda duda que tanto Ucrania como Rusia han perdido un número incalculable de personas porque la administración Biden decidió que, desde su perspectiva, convertir a Ucrania en un atolladero para Rusia era una oportunidad mucho más significativa que dejar que ambos países vivieran en paz.
* Gracias a Aaron Maté y a la colaboración de Federico Aguilera Klink
