En los agitados días de la crisis financiera mundial posterior a 2008 , Italia estuvo brevemente en riesgo de incumplir su enorme deuda, pero se la consideró demasiado grande para quebrar y recibió un trato diferente al de Grecia. Todo el proyecto europeo podría haberse derrumbado si Italia, una enorme potencia económica y manufacturera , hubiera incumplido. 

En la región MENA, este dicho encaja perfectamente con Egipto , cuyo fracaso podría tener vastas implicaciones geopolíticas regionales que no perdonarían a Europa. 

Egipto tiene uno de los PIB más altos de África y, con una población que supera los 104 millones , también es el país más poblado de la región. Egipto tiene millones de estudiantes de educación superior y una enorme fuerza laboral. 

Por tanto, la resiliencia socioeconómica del país debería ser una preocupación importante dentro del complejo teatro euromediterráneo. El colapso de Egipto podría tener un impacto regional desestabilizador similar al de la Revolución iraní de 1979 .

Hoy en día, la situación económica y financiera de Egipto es muy difícil. El Banco Mundial estima que alrededor del 30 por ciento de su población se enfrenta a la pobreza; esa cifra tiene cinco años y pronto millones de personas podrían sumarse a ellas. En diciembre pasado la inflación alcanzó el 33 por ciento y se espera que aumente al 45 por ciento a finales de este año.

Debido a la actual crisis en el Mar Rojo , los ingresos de Egipto se han contraído significativamente, lo que añade más estrés. Egipto ya alberga a unos nueve millones de migrantes y refugiados, incluidos cuatro millones de sudaneses  y 1,5 millones de sirios .

Transformación económica

Hace casi una década, Egipto lanzó su ambiciosa Visión 2030 , una iniciativa de desarrollo integral cuyo objetivo es transformar la economía del país en una “economía de mercado equilibrada, basada en el conocimiento, competitiva, diversificada, caracterizada por un entorno macroeconómico estable, capaz de lograr políticas inclusivas y sostenibles”. crecimiento". 

La visión apuntaba a mejorar la infraestructura egipcia en los campos de transporte, energía, innovación, investigación científica, gobierno transparente, justicia social, salud, educación, cultura y desarrollo urbano, entre otros. 

La UE y sus Estados miembros intentan ahora repetir con El Cairo lo que lograron con éxito con Ankara.

A pesar de su terrible situación financiera, Egipto está avanzando con los faraónicos proyectos de infraestructura de Visión 2030, como una nueva capital administrativa , ya que las autoridades egipcias han llegado a la conclusión de que, desde un punto de vista urbanístico, la actual ciudad de El Cairo no se puede gestionar ni reorganizar. 

Sin duda, estos proyectos pueden ser útiles para impulsar el crecimiento económico y las oportunidades laborales. Pero es legítimo cuestionar el tamaño de determinadas infraestructuras en desarrollo. ¿Era realmente necesario convertir el nuevo cuartel general de las fuerzas armadas egipcias en un octágono , más grande que el Pentágono estadounidense? ¿O construir la Iconic Tower , el edificio más alto de toda África?

El Mediterráneo oriental presenta un arco de crisis desde Túnez hasta Siria, con Libia , Egipto, Israel-Palestina y el Líbano en el medio, donde el potencial de conflictos y flujos de refugiados es bastante alto. Egipto sigue siendo un punto fundamental en este arco. 

La decisión del gobierno egipcio de construir una nueva capital lejos de El Cairo también podría interpretarse como una precaución para aislar y proteger a la clase dominante de posibles trastornos causados ​​por la terrible situación económica; ¿Es posible entonces que el presidente Abdel Fattah el-Sisi y los militares esperen otra Primavera Árabe?

Para poner toda la cuestión en el contexto adecuado, basta mencionar que el colapso de Egipto podría tener un impacto regional desestabilizador similar al de la  Revolución iraní de 1979  , que no perdonaría a Europa.

La Unión Europea lleva años preocupada por limitar la migración a través del Mediterráneo desde el norte de África, firmando acuerdos con numerosos países ribereños del mar con ese fin. Pero la UE dejó el trabajo a largo plazo de crear condiciones para el desarrollo sostenible en África en manos de China , que ha estado invirtiendo masivamente en el continente durante décadas. 

'Dinero en efectivo para el control migratorio'

Italia, uno de los países más afectados por los flujos de refugiados del Mediterráneo, dio a conocer recientemente su llamado Plan Mattei -llamado así en honor del fallecido director de la empresa energética Eni, Enrico Mattei- en un intento de estimular las oportunidades de crecimiento en África, lo que podría evitar la emigración. . Pero el gobierno italiano ha reservado poco menos de 6.000 millones de dólares para el plan , en comparación con la enorme inversión de 400.000 millones de dólares de China en el continente.

Hace unos años, la UE llegó a un acuerdo de 3.000 millones de euros (3.300 millones de dólares) con Turquía como incentivo para que Ankara detuviera la ola de refugiados de la Siria devastada por la guerra que intentaban llegar a Europa. Hasta cierto punto, el acuerdo funcionó y se cerró la llamada ruta de los Balcanes. 

Cómo se beneficia Europa a expensas de los pobres de Egipto

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La UE y sus estados miembros, conscientes de la difícil situación financiera de Egipto y de los nueve millones de inmigrantes y refugiados que acoge, ahora están intentando repetir con El Cairo lo que lograron exitosamente con Ankara. 

A principios de este mes, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, acompañada por los líderes de Austria, Bélgica, Chipre, Grecia e Italia, firmó un acuerdo en El Cairo con el presidente Sisi.

El paquete de préstamos, subvenciones y acuerdos de cooperación energética por valor de 7.400 millones de euros (8.000 millones de dólares) tiene como objetivo sostener el país y prevenir un posible flujo de refugiados. También pretende aumentar la producción de energía egipcia para alejar aún más a Europa del gas ruso . 

Dejando de lado temporalmente las preocupaciones planteadas por muchos grupos de derechos humanos sobre el enfoque de la UE de “dinero a cambio de control migratorio”, que corre el riesgo de fortalecer el liderazgo autocrático, vale la pena analizar el mérito del acuerdo UE-Egipto mirando cuidadosamente sus cifras. Según se informa, el acuerdo incluye  5.000 millones de euros en préstamos, 1.800 millones de euros en inversiones y 600 millones de euros en subvenciones, un tercio de los cuales se dedica a la lucha contra la migración. En otras palabras, la mayor parte del paquete son préstamos.

Enfoque distópico

Compárese lo que podría estar en juego con Egipto y el tamaño financiero mucho mayor del compromiso de la UE hacia Ucrania, desde que comenzó el conflicto, incluido el  último paquete de ayuda  valorado en 50.000 millones de euros (55.000 millones de dólares).

Aunque Egipto no está en guerra y no ha experimentado el tipo de destrucción generalizada que enfrenta Ucrania, su población es varias veces mayor.

¿Estamos seguros de que este paquete de la UE no oculta algo mucho más siniestro sobre el futuro de Gaza y su población? 

Europa se prepara para una “economía de guerra” ante una supuesta amenaza rusa a la UE que aún es especulativa. Las últimas y preocupantes declaraciones del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y del  presidente francés  , Emmanuel Macron, hablan por sí solas.

El primero ha  instado inequívocamente  a los Estados miembros de la UE a prepararse para una economía de guerra, mientras que el segundo  no ha descartado  el despliegue de tropas occidentales en Ucrania. Al mismo tiempo, la UE parece estar subestimando una amenaza mucho mayor y real en sus fronteras meridionales. 

Mientras los líderes de la UE siguen obsesionados con una supuesta amenaza rusa a Europa del Este, la actividad militar de Moscú en el África subsahariana está aumentando, desplazando esencialmente a los franceses. Moscú solía tener una fuerte influencia energética sobre Europa a través de sus masivos suministros de energía; ¿Está el Kremlin tratando de obtener una nueva influencia contra Europa con sus nuevos aliados en África Occidental, rica en recursos?

Por último, pero no menos importante, al observar la trágica situación en Gaza y la posible operación militar israelí en Rafah que podría desplazar a más de un millón de palestinos, ¿estamos seguros de que este paquete de la UE no oculta algo mucho más siniestro sobre el futuro de Gaza y su ¿población? 

¿Podría el paquete de 8.000 millones de dólares ser un intento de sobornar a Egipto para que acepte un éxodo “temporal” de palestinos al Sinaí, con el compromiso de El Cairo de mantenerlos allí? ¿Saben los líderes europeos algo que sus ciudadanos aún no saben?