Ya tenemos, en todos los pueblos que nos riscamos con el estado español, la piel curtida, para conocer muestras y muestras del descaro impenitente de los partidos que detentan el poder gracias al poder económico que consiguen con dinero mal habido. Ahora, la Fiscalía (y le llaman anticorrupción, para más cinismo), dice que no ve delito del Pp, por mucho que se sepa que paga su funcionamiento, sus sedes y sus campañas, con dinero de ignoto origen. A esta Fiscalía de erráticas decisiones, le ha faltado tiempo para cumplir órdenes, en cuanto defenestraron a uno de los pocos jueces valientes que en el Foro han sido.

Izquierda Unida Canaria, Los Verdes, Unidad del Pueblo y Alternativa Republicana, coalición que concurre a los comicios bajo la denominación de Canarias decide, exige responsabilidades a los gobiernos de España y Canarias por la política altamente perjudicial con el medio natural canario al considerar que ambos gobiernos son culpables de un delito medioambiental provocado por la nefasta gestión del accidente del pesquero ruso Oleg Navdenoz, dedicado a la pesca ilegal y con 1400 toneladas de combustible en sus depósitos.

El Juzgado aplaza la vista un mes, porque la acusación particular acusa a la estudiante Guacimara Vera de otro delito y pide ahora cuatro años. La fiscalía no ve delito alguno.

En la Coalición canaria de nombre, ponen la ropa en remojo, expulsando por allá, prohiendo -ahora- los regalos, por acá.  Una curiosa manera de exculparse por anticipado, cuando ese partido -como otros- lleva decenas de años practicando la costumbre del regalo y el favor, cuando no la mordida directa. Como si no supiéramos la facilidad con que se ocultan las dávidas cuando interesa. Y, en úlitmo caso, no  asistiéramos a la pasividad que las instancias judiciales desarrollan para investigar las relaciones entre los actos dministrativos y las pertenencias o disfrutes de quienes las toman. Es el permanente problema de la imposibilidad palmaria de demostrar el cohecho. 

"El juez Ruz confirma que el PP se lucró con fondos procedentes de un delito de la trama Gürtel" Aunque el cada vez más complaciente EL PAÍS intente disimular la cosa, resaltando que "el PP ocultó fondos a la Audiencia de Cuentas", lo cierto es que lo que el juez Ruz ha demostrado es que el partido llamado popular se ha financiado con perras mal habidas. 



 

La AECE, Asociación española para la calidad en la edificación publica en YOUTUBE este aleccionadro vídeo, que vale la pena ver con calma. No son más que tres minutos. Y lo dicen todo.

Arrasados miles de puestos de trabajo, convenios, salarios y derechos, resultado de las sucesivas contrarreformas laborales orquestadas por los monopolios y ejecutadas por sus gobiernos, que nos trajeron un endurecimiento salvaje de la explotación y el despido de 120 mil trabajadores/as en 2013,  mientras las grandes empresas del Ibex35 se reparten 8 mil millones de euros y su Estado solicita penas de prisión para 300 trabajadores.

Comunicado de la Unión Progresista de Inspectores de Trabajo UPIT

No somos criminales... por apoyarnos... por no tener papeles... por ejercer nuestra libertad de expresión... por tener un trastorno mental... por sobrevivir vendiendo en nuestra manta. Somos personas que sueñan con una sociedad solidaria, empática, consciente, activa y fuerte. Somos tus vecinos y vecinas. No Somos Delito Plataforma contra la reforma del Código Penal, la Ley de Seguridad Ciudadana y la Ley de seguridad privada

En la práctica habitual de defender a los suyos, la justicia española ha rechazado la extradición del que fuera capitán torturador de la Guardia Civil, Jesús Muñecas, demandada por la jueza argentina Servini de Cubría. Dice la Audiencia Nacional que los delitos de tortura de tortura"han prescrito". Pues yo digo que un sistema que considera prescritibles los delitos de esta terrible naturaleza, no es un sistema democrático. Este estado de derecha que es el estado español, no solamente es el estado del paro descomunal, de la miseria lacerante. Es también el estado de la impunidad de los delitos contra los derechos humanos. Y esto hay que cambiarlo.