Otro chantaje psociata: o Pp con su reforma laboral; o nosotros, con la de Garicano - por Chema Tante
Desde que el partido llamado popular fortaleciera su posición electoral, gracias a los desastres del partido español que un día fuera socialista y obrero, este partido ha basado todas sus campañas en el mismo chantaje: 'quién no vote PsoE, está votando Pp'. Con esta treta, potenciada además por el obtuso sistema electoral, la opción psociata ha conseguido, elección tras elección, birlar muchísimos votos a otros partidos progresistas, en especial, a Izquierda Unida. Mucha gente, que no termina de asumir que el PsoE le juega el agua al neoliberalismo, porque está a su vez amarrado por sus compromisos financieros, sigue cayendo en esa burda trampa.
Otro chantaje psociata: o Pp con su reforma laboral; o nosotros, con la de Garicano - por Chema Tante
Desde que el partido llamado popular fortaleciera su posición electoral, gracias a los desastres del partido español que un día fuera socialista y obrero, este partido ha basado todas sus campañas en el mismo chantaje: 'quién no vote PsoE, está votando Pp'. Con esta treta, potenciada además por el obtuso sistema electoral, la opción psociata ha conseguido, elección tras elección, birlar muchísimos votos a otros partidos progresistas, en especial, a Izquierda Unida. Mucha gente, que no termina de asumir que el PsoE le juega el agua al neoliberalismo, porque está a su vez amarrado por sus compromisos financieros, sigue cayendo en esa burda trampa.
Ahora, el PsoE ha cerrado un pacto con la franquicia del Pp, que se llama CIUDADANOS; y plantea los mismos criterios neoliberales que su partido madre. Rivera y Garicano lo envuelven de fresca modernidad, pero los puntos esenciales de sus propuestas serían firmados sin reparos tanto por Tatcher, como por Merkel, Lagarde o Aznar. Que CIUDADANOS es un partido de derechas, no lo digo yo, solamente: lo dice mucha gente, incluido el propio Pedro Sánchez, como nos recuerda El Gran Wyoming. "España no necesita más derechas [refiréndose a CIUDADANOS, Pedro Sánchez, noviembre 2015]. (1)
Los términos del pacto entre CIUDADANOS y el partido que se dice socialista y obrero, contradicen el esquema ideológico realmente socialista. No derogan la reforma laboral ppera y mantienen la desigualdad fiscal, cargando el peso tributario en las clases medias y el consumo. Por eso, lo que han pactado estas dos fuerzas tramposas, no puede ser aceptado por nadie que se considere socialista de verdad. Por eso, además de PODEMOS, COMPROMÍS e IZQUIERDA UNIDA, lo han rechazado,
Desde el mismo 21 de diciembre, Pedro Sánchez sabía lo evidente: que es materialmente imposible formar un gobierno de progreso en el estado español, porque, lamentablemente, los partidos de izquierda necesitan el voto o la abstención de partidos soberanistas. Y estos partidos soberanistas exigen una solución democrática para el derecho a decidir. Algo que la fuerte fracción del PsoE que profesa un rancio españolismo no está dispuesta a aceptar. Contradiciendo, por cierto, las propias decisiones que adoptó el PsoE en su histórico congreso de Suresnes, en 1974, que entronizó a Felipe González, proclamando que "La definitiva solución del problema de las nacionalidades que integran el Estado español parte indefectiblemente del pleno reconocimiento del derecho de autodeterminación" (sic). Cómo dice el maestro Vicenç Navarro, "La resistencia al referéndum es una excusa para que no se establezca un gobierno de izquierdas" (2)
A pesar de saber que no puede formar un gobierno progresista, Pedro Sánchez aceptó el encargo del Jefe del Estado y ha representado una comedia, aparentando que negociaba con la izquierda, mientras se conchavaba con la derecha de Ciudadanos, soñando, además, con la abstención ppera. Una representación absolutamente electoralista, que ha estado adobada con las descalificaciones de PODEMOS, que ha hecho, a la luz del día, honesta y democráticamente, lo mismito que CIUDADANOS: plantear sus aspiraciones.
Y, en esa misma línea electoralista del chantaje, en cuanto PODEMOS se ha negado a seguir negociando con un partido que ya ha cerrado su acuerdo con la derecha, ya las declaraciones han empezado con su tramposa declaración: quien no vote al PsoE, está permitiendo al Pp seguir en el poder. Y EL PAÍS, el medio que sigue la estela psociata de negación del concepto de progreso, apalanca el chantaje con este titular perverso: "PP y Podemos harán naufragar el pacto entre Sánchez y Rivera"
Esta es la realidad y todo indica que ahora, a finales de febrero, estamos igual que en diciembre: preparando unas nuevas elecciones. Con las mismas trampas psociatas.
(2) http://www.vnavarro.org/?p=13070