El engaño de Stoltenberg, las pérdidas militares de Macron y Occidente se debilita en Ucrania no miembro de la OTAN - por Rodney Atkinson y Dmitry Babich
El engaño de Stoltenberg, las pérdidas militares de Macron y Occidente se debilita en Ucrania no miembro de la OTAN
Rodney Atkinson y Dmitry Babich
FREE NATIONS
GLOBAL RESEARCH
Si bien la publicación estadounidense Foreign Policy acepta el argumento de Putin sobre Ucrania no perteneciente a la OTAN y admite que a Rusia le importa más Ucrania que Occidente, hay una gran disensión dentro de la alianza occidental. Jens Stoltenberg, hablando en la ceremonia de ingreso de Suecia a la OTAN, continúa con la retórica de guerra:
La rendición no es una solución pacífica. Necesitamos seguir fortaleciendo a Ucrania. Necesitamos mostrarle a Putin que no conseguirá lo que quiere en el campo de batalla.
Pero un informe militar francés filtrado a los medios franceses afirma lo contrario:
“El error de análisis y de juicio más grave sería seguir buscando soluciones exclusivamente militares para detener las hostilidades”. Un oficial francés resume: “Está claro, en vista de las fuerzas presentes, que Ucrania no puede ganar esta guerra militarmente”.
El informe francés merece un examen minucioso porque (como lo demuestra la ira de Macron y su retórica cada vez más agresiva) los franceses probablemente tienen más tropas sobre el terreno en Ucrania que nadie y cientos han muerto en bombardeos rusos contra objetivos de planificación militar. El informe francés continúa:
“Zelensky necesitaría 35.000 hombres por mes, no recluta a la mitad de ellos, mientras que Putin recurre a un grupo de 30.000 voluntarios mensuales. El fracaso ucraniano en Avdiïvka muestra que, a pesar del envío de emergencia de una brigada “élite” – la 3.ª brigada de asalto aéreo de Azov – Kiev no es capaz de restablecer localmente un sector del frente en colapso”.
Los belicistas ucranianos también sufrieron un duro golpe por parte del Papa, que en una entrevista en la televisión suiza llamó a Kiev a negociar la paz:
Creo que más fuerte es el que ve la situación, el que piensa en las personas y el que tiene el coraje de izar la bandera blanca y negociar. Hoy es posible negociar con la ayuda de las potencias internacionales. La palabra “negociación” es atrevida. Cuando ves que estás fallando, que las cosas van mal, necesitas tener el coraje de negociar. Qué vergüenza, pero ¿en cuántas muertes terminará esto? Llevar a cabo negociaciones de manera oportuna y buscar algún país que actúe como mediador.
Aquí Dmitry Babich contrasta la evaluación racional de las pérdidas y la debilidad militar de los expertos occidentales con la retórica agresiva e histérica de tantos "estadistas" occidentales.
El periódico estadounidense Foreign Policy argumenta en contra de la membresía de Ucrania en la OTAN ***:
Dmitry Babich
Las recientes declaraciones de los dirigentes occidentales sobre la guerra de Ucrania dan la impresión de esquizofrenia. Lo extraño de la situación actual es el hecho de que las declaraciones irresponsables provienen de líderes políticos en el poder, mientras que al menos algunas voces en los medios de comunicación y en la oposición intentan hacer entrar en razón a los “tomadores de decisiones”.
Solía ser al revés: los “sueños locos” y la retórica extrema eran dominio de los medios de comunicación, mientras que se esperaba que las figuras políticas actuaran responsablemente.
Incluso en la clase política, la extravagante declaración de Macron de que enviar tropas de la OTAN para ayudar al régimen de Zelensky “no estaba excluido” pronto fue desactivada por el Ministro de Defensa francés, Sebastian Lecornu, quien dijo que tal decisión “no estaba sobre la mesa en este momento”.
El Ministro de Asuntos Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, pidió una “escalada asimétrica” en Ucrania, por parte de la OTAN. En opinión de Sikorski, la presencia de tropas de la OTAN en Ucrania “no debería ser algo impensable”. No sorprende la declaración de este ex ciudadano británico (Sikorski huyó de Polonia en los tiempos difíciles de la ley marcial en los años 1980) y marido de la “neocon media Valkiria” Ann Applebaum.
Las raras voces de la razón se escuchan desde el lado de los expertos: desde una pequeña parte de los medios profesionales.
Foreign Policy , una de las revistas estadounidenses más autorizadas sobre asuntos internacionales, incluso publicó un artículo negando la necesidad de que Kiev se una a la OTAN. El artículo se titula “La OTAN no debería aceptar a Ucrania, por el bien de Ucrania”. Los dos autores del artículo prometen proporcionar "las cinco razones principales por las que la ampliación de la alianza occidental empeoraría aún más la situación de Kiev".
Los autores del artículo, Stephen Walt y Robert Renée Belfer, se dan cuenta de que van en contra de la corriente principal occidental, porque su sugerencia de no incorporar a Ucrania a la OTAN es en realidad la línea roja de larga data de Rusia, repetida muchas veces antes de febrero de 2022 por el presidente Putin.
Entonces, ¿qué hizo que los autores de Foreign Policy se alejaran de la corriente dominante occidental en la narrativa OTAN-Ucrania? Uno de los factores fue el continuo fracaso militar de Kiev. Aquí hay una cita del artículo de The Foreign Policy:
”En cuanto a Ucrania, nuestra creencia de que incorporarla a la OTAN ahora (o en el futuro cercano) no es prudente se basa en varias suposiciones. Una es que Ucrania no puede revertir la situación en el campo de batalla y reconquistar su territorio perdido a menos que obtenga muchas más armas y tenga tiempo para reconstituir sus fuerzas después de los reveses del año pasado. Está sufriendo una grave (y probablemente irreversible) escasez de mano de obra y la combinación de vigilancia con drones, artillería y extensas fortificaciones rusas hará que a Kiev le resulte difícil o imposible lograr grandes avances territoriales. Los partidarios de Ucrania en Occidente se equivocaron la primavera pasada cuando ofrecieron pronósticos optimistas sobre la entonces inminente contraofensiva. Y ahora están repitiendo este error al sugerir que todavía hay muchas maneras para que Ucrania cambie la situación”.
"Kiev no puede revertir la situación sobre el terreno", dice el artículo de FP, "donde las mareas de la batalla han cambiado contra Ucrania". FP trae malas noticias al régimen de Zelensky: cada día que pasa tiene menos posibilidades de “reconquistar el territorio perdido”.
Pero la principal razón del giro de los autores hacia el realismo ni siquiera es militar, sino psicológica. ¿A quién le importa más Ucrania? La respuesta a esta pregunta se hizo evidente en los últimos meses. "Nuestra suposición es que a los líderes rusos les importa más el destino de Ucrania que a Occidente", dice el artículo.
La cuestión no es sólo la reconstrucción de posguerra, que Rusia ya ha iniciado, digamos, en Mariupol. Ningún país de la OTAN está dispuesto a enviar a Ucrania un número de tropas que sea ni remotamente comparable al contingente del ejército ruso que opera actualmente en la línea del frente.
Los autores reconocen tardíamente que Occidente no ha actuado en interés de Ucrania desde el principio: “El compromiso tantas veces repetido de la OTAN de incorporar a Ucrania a la alianza sin duda alimentó las preocupaciones de Moscú”. “ Es imposible negar la evidencia de que la perspectiva de que Ucrania se una a la OTAN impulsó las acciones de Putin” ; de esta manera, el artículo de Foreign Policy admite tardíamente una simple verdad que había sido negada tanto en Washington como en Bruselas durante años.
Por lo tanto, la membresía de Ucrania en la OTAN “sólo prolongará la guerra”, concluye Foreign Policy , y nadie podría estar más de acuerdo. “Puede que la neutralidad no sea tan mala para Ucrania”; eso también es cierto. La pregunta es: ¿por qué la opinión sabia se limita a los márgenes de la comunidad de expertos, mientras que las extravagantes y agresivas sugerencias de Macron y Sikorski son la corriente principal?
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El apoyo a esto proviene de muchos en el Congreso, incluido el senador de Utah Mike Lee, quien se desempeña como republicano de mayor rango en el Subcomité Judicial sobre Antimonopolio, Política de Competencia y Derechos del Consumidor .
"Si Ucrania entra, tendremos que abandonar la OTAN ", escribió en The American Conservative.
“A pesar de lo que afirmarían la administración Biden y el establishment de la política exterior, la decisión de Rusia de perseguir objetivos militares en Ucrania se debió en gran parte a la perspectiva de una mayor expansión de la OTAN tanto para Ucrania como para Georgia, una línea roja que Vladimir Putin trazó ya 2008. En lugar de tomar en serio esas advertencias, las capitales estadounidenses y europeas continuaron tocando el tambor de la expansión promocionando los tontos deseos del “orden internacional basado en reglas” por encima del realismo”.
* Gracias a Rodney Atkinson y Dmitry Babich, FREE NATIONS y GLOBAL RESEARCH y a la colaboración de Federico Aguilera Klink
