Independencia y Descolonización sí, pero cuando podamos hacerlo. Soberanía Alimentaria (Anselmo Felipe "Rukaden Ait Anaga")
Anselmo Felipe "Rukaden Ait Anaga" aborda, en EL PAÍS CANARIO, un punto del que suelen olvidarse muchas gentes independentistas. El hecho de que no hay posibilidad de sberanía política, si no se posee la soberania alimentaria y -añadop yo, Chema Tante- la soberançia energética. Tanto es así, que las estrategias de los partidos españoles, Pp Y PsoE y del partido malinche, Cc se han encaminado, con el funesto éxito comprobable, a desmantelar toda posibilidad de que ekl archipiélago se autoabastezca. ni de alimentos, ni de energía. Un autoabastecimiento que es posible, en los dos campos. En lo otcante a alimentos, desde siempre; y en lo que respecta a la energía, desde que la tecnología se ha aliado con la naturaleza y permite ya a Canarias generar energía con fuentes renovables. Cuando un territorio importa el 90 % de sus alimentos y el 95 % de la energía, y, encima, se trata de un territorio desconectado y alejado, la autodeterminaciuón entra de lleno en el ámbito de lo trrealizable. Toda acción independentista debe iniciarse, como dice ukaden Ait Anaga, en lo alimentario y, como digo yo, en lo energético.
Siempre he defendido que antes de que llegue la independencia tenemos un trabajo previo que hacer. Arduo trabajo, puesto que no solo se trata de organizar y gobernar un pueblo, un país, sino crear las condiciones objetivas para que ese pueblo y su Estado puedan vivir dignamente con total independencia. Es decir, ante todo es imprescindible crear una Organización Económico- Productiva que asegure no solo la alimentación de nuestro pueblo, sino que debe ser capaz de asegurar los bienes de consumo necesarios para una vida digna, y la organización de un Aparato Administrativo Estatal que pueda garantizar a cada canario un techo, una educación, una sanidad, servicios e infraestructuras, un sistema judicial y político digno, moderno y democrático, un trabajo digno y un salario acorde, y la seguridad de que su modo de vida y su libertad no puedan ser puestas en peligro por nadie (a grandes rasgos).