De la crisis o buscando alternativas. La salida será politica - por Carlos Martinez
Dos artículos tratando el mismo fenómeno. Miguel Pineda en LA JORNADA y Juan Pedro Velázquez-Gaztelu en ALTERNATIVAS ECONÓMICAS comentando un libro de dos profesionales que escriben bajo el alias de JonathaMcMillan. Sobre otra de las enormes transformaciones que están ocurriendo. Lo recomienda Francisco Morote, de Attac Canarias, que dice "Banksters ¿con los días contados?". Y yo, Chema Tante, agrego que la banca tradicional, la que yo llamo la banca estafadora, tiene sus días contados. Todo lo que tenga que ver con el dinero se hará vía digital y cajeros. Ese es el futuro que ya está aquí. Y cean como el libro citado deja clarito que lo que está sufriendo la banca tradcional se lo merece, por su voracidad.
Lo sirve EUROPA PRESS, lo difunde DIARIO DE AVISOS, lo comento yo, Chema Tante y lo sabe cualquiera que tengo un poco de fundamento mental. En Canarias el paro se desatará a corto plazo, y el turismo masivo no podrá impedirlo. El gobierno de Canarias y el empresariado tolete se empeñan en resucitar un muerto, en lugar de buscar soluciones, que las hay. Esto no es ningún chiste, noes cosa de broma.
Otro excelente análisis de Vicenç Navarro que señala el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado, en PÚBLICO y en el blog del autor. Navarro nos plantea una peliaguda perspectiva. O nos viene el imeprio de la derecha, fascista, que aprovechará de manera populista los problemas gravísimos que enfrenta la gehte, o nos viene, cosa que duda Navarro y yo, Chema Tante, también, se adelanta una frente de Izquierdas, cosa, como digo, improbable, por el cainismo insufrible de ciertas izquierdas y por la sumisón intolerable de otras a la neoliberalismo. Y existe la tercera posibilidad, la que sería deseable: que la presión social sea asumida y canalizad por los partido de verdad de izquierda y se impongan las soluciones deiitivas: la justicia social, económica y fiscal
Juan Torres, en este oportuno artículo en PÚBLICO que selecciona el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado trata del tremendo brete en que se ha metido la economía de este estado de derecha español por la inactividad empresarial y laboral obligada por la cuarentena coronavírica. Y, a la par que invoca la intervención pública para capear la tempestad, aporta una serie de propuestas, muy adecuadas a la situación de guerra que enfrentamos. Sin embargo, yo, Chema Tante, siento que en ese trío de ideas de Torres: emisión de Deuda, Fondo Patriótico y recorte de altos sueldos públicos, falta una más: la que tiene que ver con la recaudación fiscal: ¿Por qué no un impuesto a las grande fortunas y una operación drástica de recuperación de disciplina fiscal, con recuperación a lo bestia de los afanado por la mafia corrupta? O, mejor todavía ¿por qué no un jubileo de la Deuda, como propone Michael Hudson? Con ese dinero, se solventa todo el problema. Y no sería la primer vez que se rechaza el pago de una Deuda, por razones menos dramáticas que esta.
Las conclusiones del 8º Taller de Asia del Sur del CADTM, que nos trae Eric Toussaint, desde Colombo, en la web del CADTM, señalado por Francisco Morote, de Attac Canarias, muestran un horizonte muy negro, en el panorama económico -y, por tanto, político- mundial. Y eso que a los factores de crisis enumerados, hay que añadir el de las consecuencias de la epidemia del Coronavirus, que se está llevado por delante a bolsas y PIB de todo el mundo.
Yo, Chema Tante, quiero creer que con el nuevo gobierno progresista, las cosas van a cambiar notablemente. Pero, tras estos decenios de poder de la derecha -declarada, del Pp- o real aunque ocultada, del PoE dominado por su ala vendida o rendida al neoliberalismo, la verdad es que el panorama de sostenibilidad en el reino de Felipe el Último es pavorosa. Nos dice la Fundación Alternativas, que traslada Feliciano Tisera en este artículo en BEZ o en el SAL Y ROCA de NUEVA TRIBUNA que Europa está avanzando en el control de emisiones de carbono, pero en cambio, en este estado español, cautivo del neoliberalismo y de la cerrilidad, la situación va para atrás. Por eso, ojalá que dentro de un poco tiempo podamos estar hablando de otro estado de cosas.