Y, cuando digo libre, no ne refiero solamente a la indepedencia política, sino a la libertad del pueblo canario dominado por cuatro oligarquías, la canaria, la española, la europea y la mundial, algo que también Antonio denunció. Y me refiero también a la ausencia de libertad de unas islas abrumadas por la brutal dependencia energética y alimentaria. Son muchas las cadenas que todavía tienen presa a Canarias.