La casa de mi tía
Julián Melero, ppío párroco de Los Jerónimos tendrá que explicar sus ardores violentos en los tribunales. No debe tener mucha preocupación su paternidad, habida cuenta de que, al final, quienes van a decidir sobre este caso, serán personas nombradas por el mismo partido de derecha que acepta y aplaudesus soflamas. Por otra parte, habrá quien piense que, para el caso que los militares le han hecho hasta ahora al belicoso cura, no hay que darle importancia al asunto. Lo que ocurre es que pocas veces ha estado la izquierda de verdad tan cerca de escalar el poder. Democráticamente, ojo, como en febrero del 36. Y puede haber todavía quien se crea salvador de la patria y vuelva a jeringarle la libertad a los pueblos que sufrimos este estado de derecha. Por eso hace bien IU, partido que sufrió en las carnes y vida de su militancia la crueldad franquista, en querellarse contra el cura enaltecedor de la violencia. Por cierto. No se sabe que el Partido Español antaño socialista y obrero, que tiene también una larga lista de militantes víctimas del franquismo, haya dicho nada. Claro, es que tienen "sentido de estado"