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lunes, 29 de abril de 2024 20:25h.
millás
Sociedad

Rosa Millán, en huelga de hambre porque Paulino y Macario no cumplen su promesa

A Rosa Millán se le llevo su casa de El Rosario la riada de 2010. Paulino, muy conocido por la población canaria y Macario, alcalde de El Rosario se comprometieron a  darle las ayudas a que tiene derecho la mujer para arrgelar su vivienda. Pero, como uso y costumbre en tales personajillos, no han honrado su palabra. Y Rosa, harta de esperar, se ha puesto en huelga de hambre. Mientras tanto, este miércoles, Paulino, con su querida Paquita almorzará opíparamente en algún buen restaurante de Bruselas, Macario, no sé dónde comerá, pero ayuno no hará. Porque lo que le pase a Rosa, a Paulino y a Macario se las trae al fresco. 
 
Política

Los trogloditas de Novecento. Juan José Millás, o Pascual Serrano, de cajera a jinetera.

Creo que esta referencia que hago al sitio PLAZA MOYUA tiene una alto valor didáctico y divulgador. Porque pone de manifiesto la vileza y la ausencia de argumentos de un partido político. PLAZA MOYUA es UPyD y funciona como UPyD, descalificando al adversario y tergiversando los hechos y las declaraciones ajenas. Este post comenta dos textos que yo agrego también en La casa de mi tía. Así que yo invito a ustedes a leer los escritos de Serrano y Millás y analizar qué tienen que ver con la sarta de improperios que lanza la página upydera. Si alguien pensaba votar por UpyD, ya sabrá así a qué atenerse.
Economía

Un cañón en el culo - por Juan José Millás


Me parece revelador que Juan José Millás, habitualmente tan claro y directo en sus textos, se haya enredado un poco en la descripción de los tremendos perjuicicios que genera la especulación financiera, en este caso en la referida a la producción de alimentos. Pero eso no que resta nada al interés de este artículo que publica en EL PAÍS.
Sociedad

El destino - por Juan José Millás



Tremenda descripción del destino que nos espera, que hace Juanjo Millás en EL PAÍS . 
Y un comentario de Rafa Dorta, que se consuela con la indiscutible calidad literaria de Juanjo. No deja de ser un consuelo, lo reconozco.