Plaza Weyler de Santa Cruz de Tenerife 15 de diciembre, a las 11.30 horas.
Yo, Chema Tante, creo que hay que airear los nombres, para exponerlos bien a la picota de la repugnancia pública, de los dos personajes a quienes Vicenç Navarro responde: a Gonzalo Bernardos y Julio Carabaña, que se permiten, cada cual por su lado, lanzar una serie de improperios y falsas acusaciones a la gente mayor que no hace sino defender su derecho constitucional a una vida digna. Por mi parte, aprovecho para negarle a Carabaña la mayor: las pensiones no pueden considerarse "una transferencia de la gente potencialmente activa a la que ya no puede hacerlo". Esa es una idea rastrera impuesta por quienes montaron este sistema de pensiones. Las pensiones, como consecuencia del derecho contemplado en el artículo 50 de la Constitución, deben ser costeadas por los Presupuestos Generales del Estado. Y añadiré que tipos como Bernardos y Carabaña, que se les supone en la órbita socialista, le hacen más daño a la causa de la defensa de los derechos populares que los proios neoliberales, porque introducen la ponzoña de la duda ante la falsedad de unas tesis marcadamente erróneas, concebidas para el beneficio de las oligarquías y los negocios privados. El artículo de Navarro, lo señala en PÚBLICO y en la web personal del autor, Antonio Aguado.
Gonzalo Bernardos y Julio Carabaña
El Sindicato de Manteros y Lateros lleva meses denunciando el acoso y las persecuciones individualizadas de agentes de la Policía Municipal a sus miembros, a otros trabajadores ambulantes y a migrantes.
El inasequible al desaliento Ángel Rivero dedica su artículo en su EN CANARIAS a reflexionar sobre las pensiones, en general, y sobre la desfachatez de M. Rajoy y demás insalla Ppera, en particular. Ángel adoba su documentado texto con viñetas del llorado Forges, y de nuestros geniales Morgan y Padylla.