Ante el incremento del 60 por ciento en el coste para los trabajadores

Intersindical exige el rescate de los aparcamientos para acabar con el pillaje en el HUC

Como regalo de Año Nuevo, la gerencia del Hospital Universitario de Canarias anuncia que tiene avanzadas las negociaciones con los pillastres de ESTACIONAMIENTOS HOSPITALARIOS S. A. para poner una nueva planta a disposición de los trabajadores, eso sí, incrementando en 1€, cerca del doble, la cuota diaria que pagamos por venir a trabajar. Conviene recordar cuál ha sido la trayectoria de los aparcamientos del HUC. Con la total oposición de los trabajadores, por aquel entonces, el Cabildo de Tenerife, y luego, el Servicio Canario de Salud, dan la concesión administrativa durante cuarenta años de un suelo público que hasta entonces utilizábamos para estacionar nuestros vehículos, a una empresa regentada por el empresario Plasencia, para la construcción y explotación de un negocio donde, con la connivencia de la administración, se cobraba a los trabajadores por venir a desarrollar sus actividades, con un número limitado a 431 plazas incluyendo motos y plazas para discapacitados en el aparcamiento anexo al Edificio de Actividades Ambulatorias y 300 en el parking de la Multa, que en la actualidad cuenta con 737 plazas para los trabajadores.

Por otro lado, a los pacientes y usuarios se les cobran unos precios desorbitados por recibir la atención sanitaria, blindando a su vez, cualquier tipo de posibilidad de aparcar fuera de las instalaciones por la colocación de obstáculos o vallado de terrenos. 

            Esta situación, fue objeto de denuncia y se ganó una sentencia que establecía la gratuidad para los trabajadores. En el año 2012, dentro del duro paquete de medidas de recorte del gobierno español del PP, CC en la nación canaria, dejaron sin efecto la medida junto a otros muchos derechos laborales, pasando a abonar una cantidad de 1,65€ cada 7 horas, superior a 2 € para los turnos de 12 horas y que ahora quieren incrementar en 1€ más cada jornada laboral, bajo la coartada de un incremento de plazas.

            Desde Intersindical Canaria afirmamos que la solución no es seguir derramando dinero público, sino retirar la concesión y pasar a gestión pública los aparcamientos del Hospital Universitario de Canarias, asignando un número adecuado de plazas gratuitas a los trabajadores como derecho laboral y a los pacientes como derecho asistencial, eliminando lo que, realmente, supone el copago de un servicio público. 

            Contrariamente, esta gerencia, en su línea neoliberal, negocia con quien rapiña el erario público para que sigan, además, extorsionando a los trabajadores. Es ya hora de que el Gobierno pase a defender los intereses de los trabajadores y usuarios del HUC y la sanidad pública, dejando de ser cómplice del enriquecimiento con dinero público de empresarios sin escrúpulos.