Hernando y la gastroenteritis (Juan Carlos Escudier)

Juan Carlos Escudier escribe este texto que recomienda Antonio Aguado en PÚBLICO, sunto de la monumental desfachatez de un sujeto llamado Hernando, como su homólogo ppero, pero que milita en las traidoras filas psociatas. No diré yo, Chema Tante, que el tal Hernando, Antonio, no merezca todos y cada uno de los epítetos y comentarios que le dirige Escudier, pero sí que afirmo que este tipejo, Hernando el psociata, no hace sino practicar las malas mañas que se han instalado en la dirección de su partido. El yo y lo mío primero, lo mío y yo, después... Así le va a su partido y así le va a este desgraciado estado de derecha.

lacasademitia.opennemas.com 28 de octubre de 2016 (08:15 h.)

Para los estudiosos de la comunicación no verbal la cara es el espejo del alma. Duchenne de Boulogne, un neurólogo francés que llegó a dar nombre a una sonrisa, sostenía que ante una alegría sincera dos músculos que circundan el ojo se contraen simultáneamente, algo que no ocurre con la risa engañosa porque uno de ellos, el orbicular, no obedece a la voluntad sino a la “emoción” verdadera. Pero no sólo en la risa se detecta la mentira. Hay quien sostiene, por ejemplo, que el golpe palaciego de Ferraz habría podido ser detectado contemplando detenidamente a Antonio Hernando, que en los días previos a la insurrección andaba literalmente descompuesto y aferrado a una botella de suero. Y no es broma.