Ciudadanos o proletarios - por Teodoro Santana
Las palabras pueden servir para aclarar la realidad o para oscurecerla.
Las palabras pueden servir para aclarar la realidad o para oscurecerla.
Los partidos estatales presentes en Canarias operan como meras franquicias, como marcas registradas que designan aquí a sus representantes, quitando y poniendo "líderes" a su gusto.
Conforme las sociedades prehistóricas fueron desarrollándose y dando paso a los distintos estadios de las familias, a la aparición progresiva de los tabúes y a la monogamia, la mujer iría quedando paulatinamente bajo el dominio del hombre.
La línea divisoria entre la Edad Media y la Modernidad es la separación entre la religión organizada y el Estado. Pero hay quienes se empeñan en volver al feudalismo, a la religión de Estado, al confesionalismo. De forman que exigen que la crítica supuestamente espiritual que ejercen sobre ateos o sobre creyentes de otros credos tome cuerpo como represión por parte del poder material del Estado.
Antonio Morales, Teodoro Sosa, Román Rodríguez, Carmen Hernández
Carmen Hernández, candidata nacionalista a la Alcaldía, arropó al líder del BNR-Nueva Canarias en el inicio de su camino para ser reelegido en el municipio norteño
Grecia le ha plantado cara a la Troika: a la Comisión Europea (o sea, representantes de la banca alemana) al BCE (o sea, el Bundesbank) y al FMI (o sea, los bancos estadounidenses)
Cosas del marketing, los fascistas españoles ya no enarbolan el yugo y las flechas, ni proclaman la “cruzada” de la “revolución nacional sindicalista”. Han aprendido: visten de Armani y dan lecciones de "democracia". Eso sí, no pueden evitar los tics franquistas y la protección a sus asesinos, ley de punto final –mal llamada de “amnistía”– incluida.
Hubo un tiempo en que, tanto en Canarias como en España, todo el mundo quería ser europeo.
El planeta inicia una nueva circunvalación al Sol, y nosotros imaginamos que son las cifras del calendario las que hacen girar al mundo. Al planeta le da igual: no atiende nuestros deseos, pensamientos, supersticiones. En su corteza, el inmenso hormiguero humano bulle, sufre, se desgasta, mientras la historia sigue su curso.