Federico Aguilera Klink destaca esta noticia ofrecida por EFE / PÚBLICO / EL MUNDO, entre otros, y comenta: "Guerra a toda costa. Las corporaciones de Occidente no renuncian a la pérdida de beneficios que puede suponer la multipolaridad, aunque desaparezca la humanidad. Aunque Borrell y compañía no tienen nada de humanos...son auténticos seres crueles y sometidos como señala Catalina Johnstone". Y yo, Chema Tante, recuerdo que ese eufemismo de "entrenamiento" es equivalente al de "asesores" con que el gobierno USA siempre inicia sus intervenciones en conflictos ajenos, aunque salga escaldado. No les importa, porque lo único que interesa a estos señores de la guerra como Biden o Borrell es el beneficio empresarial con el negocio de la muerte y el dolor
Francisco Morote, de Attac Canarias, señala estos dos artículos y aporta el titular, sobre la vesania demente de la rusofobia. Pedro Costa Morata en EL SALTO y Gustavo Morales en EL DEBATE. Y yo, Chema Tante, agrego que la maldad suele estar acompañada de la estupidez. Enredar la cultura con las fobias bélicas sueles ser un disparate. Y. como toda guerra está motivada por la codicia este disparate se convierte en perverso.
Alfonso Lafarga en CONTRAMUTIS certifica el cinismo rampante de Sánchez