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Varios medios difunden esta reanimadora y reveladora información. Una noticia que viene a darnos la razón a quienes venimos proclamando hace tanto tiempo que una de las razones que vedan a este estado la condición de  "derecho" es que le falla estrepitosamente, también, la pata de la justicia. La Justicia está infectada por las intromisiones y presiones del poder político. Unas presiones que se unen a las ya de por sí inaceptables prácticas de abandono de la equidad, sirviendo prejuicios, fanatismos e intolerancia. Las múltiples varas de medir que se  aprecian en las diferentes sentencias y decisiones. Jueces, juezas, fiscalas y fiscales amenazan con movilizarse en contra de esta aberrante situación. Y yo, Chema Tante, agrego que este esperpento de justicia merece que estas y estos profesionales se pongan en huelga indefinida, ya.