La casa de mi tía
Por ejemplo, podrá identificarnos, meternos mano y detenernos cualquier empleado de este convicto condenado a cárcel, pero, eso sí, eximio y generoso donante del Pp y, por supuesto, indultado. No sé si me explico
Creo que el titular de Carlos E. Cué en EL PAÍS describe mejor que ningún otro comentario el nuevo dislate del ppío Fernández Díaz, ampliando las atribuicones de los seguratas privados. Ni mayor seguridad ni boberías. La única razón, es economicista y de control ciudadano. Que Achamán nos coja confesados. Los pperos nos dejan a merced de cualquier bobilín disfrazado de poli gringo, con entorchados de teatrillo. Dicho sea con todo respeto a la mucha gente que se gana la vida en ese oficio, la verdad es que entre ellos hay cada elemento...