Jugosa entrevista que le hace en LA VANGUARDIA Pedro Pallín a Pedro Iglesias. El flamante vicepresidencia demuestra que es en verdad un hombre de estado. Su visión estratégica sobre la necesidad de aplicar políticas sociales y su concepto de diálogo para aliviar las tensiones territoriales augura que si sus propuestas son asumidas en el Consejo de Ministras y Ministros se abre un horizonte de esperanza en este reino de felipe el último.
Sea soberanista o no, nadie puede negar el alto valor de este artículo de Vicenç Navarro que señala Francisco Morote, de Attac Canarias, en PÚBLICO, NUEVA TRIBUNA o el blog del profesor. Navarro escribe y argumenta desde su legítima posición nacionalista española. Y yo, Chema Tante, que me integro de manera igualmente lícita, en las filas independentistas tengo que reconocer que a Navarro le sobra razón en muchas de las tesis que aporta en su texto. Es obvio que las fuerzas soberanistas deberían aplicar mayor sentido estratégico político en sus decisiones, para no abrir paso a las hordas neoliberales. Pero Navarro debe también entender que, para mucha gente, el estado español es un conjunto de naciones uncidas a la fuerza en una entelequia administrativa sin sentido. No puedo detenerme en analizar todas las facetas de este artículo, pero sí le diré al respetado profesor que nadie, ni siquiera él con toda su autoridad académica, puede decir eso de que "en Cataluña la mayoría no es independentista". Por la sencilla razón de que no se ha hecho .porque, significativamente, siempre se prohíbe- consulta ninguna que establezca de manera definitiva esa proporción. Navarro puede sentirse en buena hora español, pero no puede negarnos a otras personas nuestro derecho a sentir que no somos secesionista, porque no puede ser secesión la separación entre entes distintos.
Con estas referencias que hace Francisco Morote, de Attac Canarias, se constata que el mexicano LA JORNADA refleja lo que todo el mundo, dentro y fuera del estado español piensa, salvo quienes permiten que el nacionalismo centralista fanático imperial españolista les nuble el seso: que la fogalera armada con el conflicto con Cataluña solamente se solventa con el diálogo, la negociación, el entendimiento. Y, además, que esa obsesión fanática, que se aplica con la misma saña con otros colectivos, como las y los pensionistas, está terminando con todo vestigio de normalidad institucional en este estado. LA JORNADA, con el artículo de su corresponsal Armando G. Tejeda y con un editorial, dejá muy clara la situación. Por cierto que he creído oportuno puntualizar el titular, con algo que dice ekltexto del artículo de Tejeda: Fueron, ni miles, sino cientos de miles. Concretamente setecientos mil.
Antonio Aguado señala y comenta este artículo que firma en PÚBLICO Vicenç Navarro. Tanto el insigne catedrático como el coherente veterano militante socialista cargan contra el independentismo catalán, adjudicándole poarte de la responsabilidad por lo que está ocurriendo en Cataluña. Y yo, Chema Tante, desde el respeto que me merecen, que es mucho, ambas personas, debo decir, simplemente, que la actitud de la multitud de soberanistas catalanes ha sido un ejemplo que deberíamos seguir quienes en todo este estado de derecha repudiamos el régimen heredado del franquismo, incluyendo a Navarro y a Aguado. Si tumbar este cínico y discriminatorio sistema supone entrar en una crisis económica y social, que sea ello bienvenido, porque, para la gente que sufre, nada será peor. En mi opinión, el recrudecimiento del ardor guerrero del nacionalismo imperial español ha sido posible, precisamente, por la ausencia de comprensión de mucha gente de la izquierda hacia el levantamiento republicano -sí, republicano, aunque parece que se olvida- catalán
Oportuno y merecido tirón de orejas que le administra Vicenç Navarro, tanto a los fanáticos nacionalistas españoles, como a los independentistas catalanes, en artículo que señala Antonio Aguado en PÚBLICO y en el blog del autor. A los nacionalistas españoles, por negar a los presos soberanistas catalanes su condición de políticos. A los independentistas catalanes, por su olvido de los represaliados del franquismo.
Antonio Aguado señala y comenta esta crónica de Paula Díaz en PÚBLICO, comentando la cínica injerencia del corruPPto partido en la campaña electoral catalana. Una injerencia, añado yo, Chema Tante que es absolutamente esperable. En estas elecciones se dirime la cuestión esencial de cuánta gente está a favor y cuánta en contra, de la independencia de Cataluña.