No seré yo quien defienda ni justifique ninguna manfestación de violencia contra nadie. Pero hay cosas que se comprenden. Creo que este hombre que ha estampado su coche contra la sede de ese partido representa todo un sentimiento generalizado de angustia frente a unas políticas que han llevado a la suina a muchísimas pequeñas y medianas empresas y a la indigencia a millones de personas.

Mientras Rajoy cacarea, dentro y fuera del estado español, sobre la falaz recuperación de la economía, la hiena riente, su ministro Montoro, lo contradice con los hechos. Porque no se puede hablar de "estar en la dirección correcta" y, al mismo tiempo, reconocer que algo tan esencial como el sistema de pensiones está en crisis terminal. La desaprensiva, incapaz, gente del partido que de popular no tiene sino el nombre se ha estallado este año 14.000 millones de euros del Fondo de Reserva de las Pensiones, para llevar el total de lo arramblado, en lo que lleva de mandato, a los 32.000 millones.

Rajoy está obligado a dimitir, como su ya ex ministra Mato, a disolver cámaras y convocar elecciones. Su gobierno es ilegítimo. Y lo mismo cabe decir de otros gobiernos sobre quienes, por sus excesivamente altos gastos, caben grandes sospechas de financiamiento irregular. (Por usar un calificativo discreto). Esto implica tanto al Pp, como al PsoE, como a CiU o a la Coalición nada canaria

Soy de quienes creen que la única razón -y, al mismo tiempo, el gran demérito- de que Miguel Sebastián esté en política, es su amistad con Zapatero. Uno más de los muchos partigazos que se pegó el cejas en su gobierno fué creer que un zoquete como Sebastián ganaría Madrid para su partido. Y como -era previsible- el tal Sebastián perdió miserablemente, lo compensó haciéndolo ministro. Y desde ese momento el tolete este no ha dejado de hacer y decir sandeces. Como esta de recuperar el centraslismo administrativo. Una idea antihistórica, antinatural y contraproducente. Sobre este tema reflexiona, con su sensatez habitual ´>Abgel Rivero en su EN CANARIAS

No se me importa un pito que las mujeres
tengan los senos como magnolias o como pasas de higo;
un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy una importancia igual a cero,
al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco
o con un aliento insecticida.

Oliverio Girondo.
 

La más diabólica eastrategia ultraliberal desplegada por esta horda pepera es el abonimable crecimiento de la deuda pública. No se trata de un endeudamiento para financiar servicios sociales o inversiones productivas, 

No será porque a Paulino, José Miguel, Cc, PsoE y, en este caso, especialmente, a Soria y al Pp no se le diga repetidamente, con toda claridad. La voz que hoy destac o es la de Raúl Vega, que el 12 de marzo, desde el SIETE SITIOS recordaba la fecha memoprable en que Canarias le dijo contundentemente, pero sin éxito, NO A LA OTAN

En una acción inaudita de sumisión a los poderes económicos internacionales (en este caso, China y USA), el partido que usurpa la digna denominación de popular se ha atrevido a ignorar la división de poderes, los principios esenciales del derecho, los tratados internacionales suscritos por el estado español y la más elemental decencia, eliminando el principio de jurisdicción universal. Ello implica el cierre de causas judiciales abiertas y la deserción de la justicia española de su deber de perseguir los delitos de lesa humanidad internacional. El juez Pedraz, con su decisión de seguir con su actuación en el caso Couso (el asesinato de un corresponsal de guerra en Irak, a manos de militares USA), una decisión felizmente aplaudida por las asociaciones de jueces, está creando un precedente de como la justicia puede y debe poner coto a la acción atolondrada de un gobierno que ha perdido toda guía del sentido común.

La gente de Burgos mantiene este lunes viva su actitud valiente, contra el despilfarro y la corrupción urbanística del partido que no es nada popular. Pero el despliegue policial es escandaloso. El partido que usurpa el apelativo popular dice que esn las movilizaciones "se han filtrado violentos", Triste excusa, para justiciar una represión injustificable.