No seré yo, Chema Tante, quien se asombre con esta noticia que difunden DIARIO LA REALIDAD SAHARAUI y KAOS EN LA RED y que señala Luis Portillo Pasqual del Riquelme. No me asombra porque, desde luego, el reíno feudal de Marruecos hace tiempo que ha sobrepasado los límites de lo admisible. Esto de utilizar templos y religiosos para difundir falacias imperialistas, es algo que está a la altura de las iniquidades que acostumbra el sátrapa de Rabat. Y hay algo también que indigna y repugna. La complicidad de los gobiernos de los estados en que esos templos y esos religiosos actúan de manera absolutamente irrespetuosa con su condición confesional. El estado español, como el chino, el ruso y los que sean, son culpables, tanto como el reino de Marruecos de esta falta de respeto a las convicciones y lugares sagrados. Y hay que recordar que esta historia lamentable va más allá de los aspectos relativos a la cuestión saharaui. Porque cuando se manipulan y utilizan los centros religiosos musulmanes, se está hacieno el juego a las rencillas entre comunidades, eso que tanto le gusta a la extrema derecha.

Las Palmas de Gran Canaria, Plaza Tillellit (Santa Ana) , Santa Cruz de Tenerife, Plaza Tillellit (españa)