En América Latina demuestran mayor sensibilidad que en Europa ante este doloroso drama colectivo que se está produciendo en India y Pakistán, no solamente por el tremendo calor, generado sin duda por el cambio climático, responsabilidad de la locura desarrollista, sino también a las malas condiciones de vida y de trabajo y al fanatismo religioso. La triste información la señala Francisco Morote, de ATTAC Canarias

Nicolás Castellano, canario, para nuestra satisfacción, es un tipo nque se deja la piel continuamente desde la SER, en defensa de los pueblos oprimnidos. Esta vez dedica su atención Nicolas a presentar informes que demuestran que, contra los embustes de los Ppíos Fernández (Díaz y Mesa), la Guardía Civil sí que disparó directamente contra seres humanos, indefensos y en peligro en la mar y que, a quienes no pudo liquidar, los expulsó fulminantemente, contra todo lo que estipula la legalidad vigente.

Cuando uno teme que esta tragedia provocada caiga como siempre en el olvido, viene la dura realidad a mantenerla viva. Dos personas muertas más en esta, insitos, provocada tragedia. Provocada, sík, lo digo por terera vez, sin miedo a la reiteración. porque estas muertes -16 van ya- no han sido un accidente. Estas muertes las ha causado la criminal actitud de un gobierno indecente.

Aunque no han pasado ni cinco días, ya la muerte de 9 u 11 (al final no se sabe cuánta gente ha sido) seres humanos, por la crueldad europea en Ceuta, ha pasado al olvido. Sin embargo, Gabriela Sánches, en EL DIARIO, publica un testimonio escalofriante, filmado por un protagonista de los hechos, un camerunés que formaba parte de los grupos que luchan por su derecho a la vida. Amigos del camerunés, ya amigos que deben ser nuestros. Como dicen en LA MAREA, "No basta con lamentar las muertes de Ceuta"

Un minuto de silencio por las muertes, y hasta la próxima. De la gente viva, ni se habla

Los intentos peperos por presentar la muerte de nueve al menos inmigrantes cuando intentaban escapar de la miseria, el hambre y las torturas que sufren en Marruecos, como si fuera un accidente desgraciado más, se quedan en eso. En intentos. Mientras tanto. la Asamblea de Ceuta guarda un minuto de silencio por los muertos. Bien. Pero sería mejor que dedicaran muchos minutos de debate a buscar soluciones a este deraama.

Instructivo artículo de Javier Fisac Seco que veo en ECO REPÚBLICANO, que explica con claridad didáctica el increíble proceso de transformación que ha llevado a un partido "republicano, laico, anticlerical y proletario" a ser un partido de tecnócratas, aliado de neoliberalismo, connivente con los poderes económicos y con la curia, que ha desertado de su condición socialista y obrera. 

Yo no soy más que una voz –la tuya, la de todos–

​la más genuina,

la más general

(León Felipe, La Insignia)

Y el energúmeno del Partido llamado popular ha elegido para hacer esta indudable apología del terrorismo franquista la fecha del 77 aniversario del primer bombardeo de Madrid, el 28 de agosto de 1936, como me recuerda Antonio Aguado. Tengo que decirlo otra vez. No se trata de ignorancia. No es que Hernando no conozca la evidencia histórica. Es que la ignora aviesamente. Es la misma, exactamente la misma ruindad que llevó al franquismo a asesinar a tantísima gente acusándola "de rebelión".

Paco Pomares cavila en DIARIO DE AVISOS sobre la Ley de Memoria Histórica, en particualr en lo que tiene que ver con la defensa del derecho humano de la gente a respetar y honrar los restos de sus familiares muertos. 

Nota de Chema Tante: Este artículo de Francisco González Tejera (en la imagen, con la foto de su abuelo asesinado por los de Manuel González Capón) sobre unas declaraciones del alcalde de Baralla, que desconocía, me ha puesto literalmente los pelos de punta. El de Baralla ha dicho despues, como siempre en estos casos, que su barbaridad "se había sacado de contexto". Aquí no hay contexto que valga. Por mucho que se retracte el alcalde, sus palabras quedan clavadas en el alma. Yo, Chema Tante, lo único que puedo decir es que le deseo a Manuel González Capón muchos años de vida, aunque se merezca otra cosa.