La emigración Canaria a Venezuela, los “Barcos Fantasma”
Esta valiosa pieza testimonial que rescata Julián Ayala tiene un misterioso origen. Lo publicaba EL TAMBOR en 2016, remitiéndose al chileno BIOCONCE 37º que, en 2013 citaba a MUNDO HISTORIA con un enlace que ha desaparecido. De manera que ignoro autor y fecha original. Pero eso no le resta importancia al texto que, junto con otro que aparece en el STRAMBOTIC de PÚBLICO y recomienda Antonio Aguado, son un fuerte estampido a nuestra conciencia de pueblo, n o solamente emigrante, sino de pueblo que fue muy bien recibido allá donde nos vimos en la obligación de mandarnos a mudar. Lo mismo que la gente de otras naciones, la gente gallega, andaluza, pero también la italiana o alemana. Algo que tenemos el deber moral de recordar y asumir en estos momentos en que arrecia la migración de tantas personas refugiadas por las mismas razones de siempre: la guerra, el hambre, la explotación. Lo que nos pasó a la gente canaria, e los tiempos del Telémaco o la Elvira o en la mísera tercera de los barcos de Trasatlántica, es lo mismo que sufrieron otras gentes, lo mismo, exactamente lo mismo, que las y los migrantes de ahora. Insisto en que esto que cuenta el texto que recomendamos Ayala y yo, fue escrito, hace, al menos, cinco años. Y nada ha cambiado, si no a peor. Y, por cierto, honor y agradecimiento a su ignoto autor.