El Frente Amplio de Canarias, en defensa de la inviolabilidad del secreto de las comunicaciones y de la desmilitarización de Canarias
El espionaje masivo, como instrumento de guerra y de dominación hegemónica, que agencias de seguridad y de inteligencia de los EEUU (NSA y la CIA) han realizado y realizan a nivel planetario, interceptando las comunicaciones a través de internet y redes de telefonía, es una violación más de los derechos humanos (a la intimidad y al secreto de las comunicaciones) por parte del imperialismo estadounidense.
06 de noviembre de 2013 (04:36 h.)
El Frente Amplio de Canarias, en defensa de la inviolabilidad del secreto de las comunicaciones y de la desmilitarización de Canarias
El espionaje masivo, como instrumento de guerra y de dominación hegemónica, que agencias de seguridad y de inteligencia de los EEUU (NSA y la CIA) han realizado y realizan a nivel planetario, interceptando las comunicaciones a través de internet y redes de telefonía, es una violación más de los derechos humanos (a la intimidad y al secreto de las comunicaciones) por parte del imperialismo estadounidense.
Ese gigante que, además, asesina extrajudicialmente (utilizando actualmente “drones”), mantiene campos de concentración de tortura ( Guantánamo), promueve guerras de ocupación, golpes y la desestabilización, a través del fascismo, contra gobiernos de países que quieren liberarse de su yugo. Desde hace más de cincuenta años ha venido perpetrando un crimen continuado de lesa humanidad contra Cuba, a través del genocida bloqueo económico, financiero y comercial, a pesar del reiterado abrumador rechazo y condena de la Asamblea General de la ONU.
El territorio del archipiélago canario, a través de sus puertos y aeropuertos fundamentalmente, está siendo utilizado por los EEUU y la OTAN como plataforma para la ocupación y saqueo por las transnacionales privadas anglosajonas y de la OTAN de los ingentes recursos naturales (petróleo, gas, minerales estratégicos y agua) del continente africano. Para ello el Estado español pone todas las facilidades: he aquí la militarización Canarias para la consecución de los objetivos imperialistas; manteniene e impone al pueblo canario unas políticas económicas que producen miseria y desempleo (más del 35%, con un desempleo juvenil de más de 60%), obligando a muchas personas a emigrar. Además de someterlo a riesgos de catástrofe ecológica con las prospecciones petrolíferas en las aguas cercanas al archipiélago canario.
El puerto de la Luz (isla de Gran Canaria) ya es utilizado por la CIA (la USAID es su pantalla) y lo es también como base operativa de los Buques de Acción Marítima (BAM), dentro del eje del sistema antimisiles de los EEUU y de la OTAN con base en Rota (Cádiz). Su aeropuerto (Gando), está en una gran parte ocupado militarmente ye es lugar de maniobras con aviones de guerra perturbadoras para la población.
En la isla de Fuerteventura han fijado campos de tiro y de entrenamiento para tropas de la OTAN en guerras de ocupación vigentes (ejemplo, Afganistán) o en proyecto, sometiendo a gran parte de su territorio a la declaración de “interés para la defensa nacional”. La montaña de la Muda, en la misma isla de Fuerteventura, han instalado antenas que pueden servir a los satélites estadounidenses y de la OTAN para el espionaje militar contra los pueblos del continente africano.
El proyecto de macro base militar en el aeropuerto de “Los Rodeos” (isla de Tenerife) . Los puertos de Arinaga (Gran Canaria) y de Granadilla (Tenerife) tampoco son ajenos a esta ocupación y utilización militar de Canarias por el imperialismo.
Canarias dijo NO A LA OTAN
El Frente Amplio de Canarias llama a defender la desmilitarización de Canarias y que se respete la voluntad de su pueblo al respecto. Exige que no se utilice su territorio para el espionaje que el imperialismo perpetra contra otros pueblos. Y que se investigue, judicial y parlamentariamente, el papel colaboracionista denunciado del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) español con las actuaciones de las agencias de seguridad y de inteligencia estadounidenses en relación a la violación de los derechos humanos a la intimidad y al secreto de las comunicaciones.