Junta Republicana de Canarias Manifiesto de apoyo a la Plataforma Ciudadana #SalvarLaTejita
Las personas y colectivos que participamos en la JUNTA REPUBLICANA DE CANARIAS nos adherimos al manifiesto de apoyo de la Plataforma Ciudadana Salvar La Tejita, y pensamos que:
La carga turística en Canarias ha llegado a su límite absoluto. Según datos del
Junta Republicana de Canarias
Manifiesto de apoyo a la Plataforma Ciudadana #SalvarLaTejita
Las personas y colectivos que participamos en la JUNTA REPUBLICANA DE CANARIAS nos adherimos al manifiesto de apoyo de la Plataforma Ciudadana Salvar La Tejita, y pensamos que:
La carga turística en Canarias ha llegado a su límite absoluto. Según datos del ISTAC, Instituto Canario de Estadística, 20141]cerró con casi 13 millones de turistas. A este dato debemos sumar los 2. 128 647 habitantes locales, lo cual nos da una cifra de más de 15.000.000 de personas. Esto deriva en una catastrófica densidad en número de habitantes por kilómetro cuadrado, para el escaso territorio de las Islas que es de 7446.95 km².
¡HE AHÍ LA IMPRESIONANTE HUELLA ECOLÓGICA QUE IMPACTA SOBRE NUESTRO SUFRIDO TERRITORIO INSULAR!
Hay que poner un límite ECOSOCIALISTA al crecimiento desenfrenado del desarrollismo turístico. Un ejemplo del escandaloso aumento turístico es la prohibición a la subida peatonal al cráter de del Teide, ya que este frágil lugar corría severos riesgos de ser apisonado por la botas de los lejanos y cercanos viajeros –visitantes.
No es extraño que constantemente se produzcan conflictos ecosociales debido a la tensión provocada por el agudo impacto poblacional sobre nuestro escaso territorio , y una de las ultimas situaciones extremas es la del deterioro de la Reserva Natural Especial de Montaña Roja, la cual contiene un hábitat natural catalogado como ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves).
Esta zona, prácticamente única en Tenerife, no ha sido respetada. En los desarrollistas años 70 fue declarada urbanizable, para ser supuestamente destinada a viviendas sociales, y en 2005, por medio de un giro especulativo de la planificación, se la desvió para usos turísticos. Así, cayó en manos de las empresas promotoras constructoras, siempre dispuestas a dar un pelotazo sobre el sufrido territorio.
Este doloroso episodio de La Tejita no es más que uno de los muchos conflictos ecosociales que se están produciendo en el Archipiélago Canario: al mismo tiempo, en la Isla de Gran Canaria también se está produciendo un ejemplo de abuso del poder municipal sobre las familias habitantes del edificio Brisas de Sardina en Santa Lucía, sobre lo cual ya se han manifestado en protesta los Colectivos Sociales.
Las personas con conciencia ecologista debemos exigir una política municipal que asuma la responsabilidad social ante el Pueblo Canario, ofreciendo una respuesta habitacional ante la masiva expropiación de viviendas que se produjo durante la época de la crisis-estafa, y debemos también exigir una responsabilidad medioambiental, ineludible en unos ecosistemas insulares tan vulnerables como la Islas.
Es por esto que apoyamos la lucha de clases alrededor del problema ecológico, que se está manifestando sobre todo a nivel municipal, e insistimos en que el municipalismo es el terreno privilegiado de la nueva política económica ECOSOCIALISTA de transición hacia modelos de energías renovables, que deben de sustituir urgentemente a la desastrosa política autotecnodestructivista del neoliberalismo de capitalización total.