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martes, 23 de abril de 2024 10:22h.

"En clave altermundista ( Altermundismo vs neoliberalismo)" (Mercurio Editorial), de Francisco Morote, a partir del 23 de junio, en librerias

 

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"En clave altermundista ( Altermundismo vs neoliberalismo)" (Mercurio Editorial), que estará en las librerías el jueves 23 de junio próximo. Recoge la mayor parte de los artículos de prensa, textos de conferencias y otras intervenciones escritas que publiqué en los últimos veinticinco años, aproximadamente.  Aquellos en los que desarrollé una actividad más intensa en los movimientos sociales altermundistas de Canarias, pero con la mirada puesta siempre en los graves problemas globales generados por el sistema capitalista, a los que en su peor versión, la neoliberal, es incapaz de dar respuesta. Pero sí hay alternativa al mundo neoliberal de los últimos 40 años. Otro mundo es necesario, un mundo altermundista -ecosocialista, feminista, pacifista, defensor incondicional de los derechos humanos-, que solo será posible si juntos, la mayoría de los pueblos y de las clases sociales víctimas del neoliberalismo, lo quieren y lo construyen.

TEXTO CONTRAPORTADA.

Globalización neoliberal y crisis financieras, económicas y sociales devastadoras (Sudeste asiático, 1997, Estados Unidos y Unión Europea, 2008 y siguientes), solo contestadas por el movimiento antiglobalización (Seattle, 1997, Foro Social Mundial, 2001).

Aceleración del calentamiento global, del cambio climático y de la destrucción de la biodiversidad, denunciados por el movimiento ecologista, femenino y juvenil en gran medida: “Cambiemos el sistema, no el clima”.

Aumento de las desigualdades sociales internacionales y nacionales, censuradas hasta por el mismo secretario general de las Naciones Unidas Antònio Guterres en su Mensaje de Año Nuevo de 2019: “La desigualdad está creciendo. Las personas están cuestionando un mundo en el que un puñado de individuos posee la misma riqueza que la mitad de la humanidad”.
Guerras, supuestamente antiterroristas, contra Afganistán (2001-2021), Irak (2003) y Libia (2011), de los Estados Unidos y sus aliados,  pero rechazada, al menos la de Irak, por la mayor manifestación pacifista de la historia (15 de febrero de 2003).
Mundialización de una pandemia (COVID-19, 2019 y siguientes), como el planeta no conocía desde hacía un siglo (gripe, 1918), pandemia que ha puesto de manifiesto la indecente insolidaridad de los países ricos con los países pobres. 

Y, por si todo esto fuera poco, a última hora, una segunda guerra fría anacrónica e intempestiva.

Este es el panorama dramático, al que este libro trata de aproximarse, de los últimos 30 años (1992-2022) de la historia del mundo.

¿Qué pensar de un mundo así?  ¿Qué podemos hacer?

Estamos profundamente equivocados si creemos que el mundo en el que vivimos es y será posible indefinidamente. El saqueo de los recursos naturales al que estamos sometiendo al planeta, la indiferencia suicida con la que contemplamos los efectos letales de nuestra acción contaminadora sobre la atmósfera y el clima de la Tierra, la resignación con la que aceptamos el aumento de las desigualdades sociales en el mundo, con su secuela inevitable de empobrecimiento y sufrimiento para la mayoría, y de enriquecimiento banal e innecesario para la minoría no son, precisamente, las mejores credenciales para afrontar el futuro de otro mundo posible, habitable y más justo para todos.   

Si no miramos de frente esta realidad, la imposibilidad ecológica y social del mundo en el que vivimos, si no reconocemos el error de posponer sine die el encaramiento de la solución de estos problemas, atendiendo a sus raíces primigenias, ese otro mundo cada día más necesario que precisamos será más difícil de construir. Se impone una revolución de las conciencias, la comprensión de que tenemos un tiempo limitado para dar una alternativa decente a unos problemas resolubles que, de no solucionarse, convertirán en un infierno, incomparablemente peor que el actual, la vida de la gran mayoría de las generaciones futuras. Y para eso lo mejor es descartar, por imposible y nocivo, el actual modelo de producción y de vida que domina el mundo. Un modelo para el que solo cuenta el enriquecimiento de unos pocos y que minimiza y niega los costes ecológicos y sociales que todos debemos pagar por ello.

Otro mundo es posible, otro mundo es necesario, pero solo si la gran mayoría de la humanidad hace suyas las ideas y valores ecologistas, socialistas, feministas, pacifistas y de defensa de los derechos humanos, será posible de verdad poner en pie ese mundo. 

 

DEDICATORIA:

 

Julia, Cira, Luis, por ser quienes son;
y a las compañeras y los compañeros
de la Comisión Ciudadana por la Paz,
de la Asociación por una Tasa
a las Transacciones financieras
y por la Acción Ciudadana (ATTAC),
de la Plataforma Pobreza Cero,
de Otra Canarias Es Posible,
de la Plataforma Canaria
contra la Criminalización de la Protesta Ciudadana
y de la Asamblea Popular de Gran Canaria

con quienes he compartido largos años
de reivindicaciones y de acción.

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MANCHETA MAYO 22