Mensaje solidario a un amigo catalán. No es España, son los malos políticos - por Olvier Herrera Marín
Mensaje solidario a un amigo catalán. No es España, son los malos políticos - por Olvier Herrera Marín, Presidente de POETAP, (Poetas de la Tierra y Amigos de la Poesía)
MENSAJE SOLIDARIO A UN AMIGO CATALÁN
NO ES ESPAÑA, SON LOS MALOS POLITICOS
Lamentablemente Hitler arrastró inmensas multitudes de la sociedad civil alemana detrás las consignas inciviles y la puesta en escena de los desfiles y los símbolos nazis con la esvástica. Y creo toda una poderosa, infernal maquinaria de guerra de expansión y dominio, sometimiento y exterminio, eligiendo la solución final para acabar con la comunidad judía en Alemania y Europa. Y a nadie se le ocurre por ello responsabilizar a Alemania de los crímenes de lesa humanidad del nazismo.
Y si Franco y el franquismo, Serrano Suñer y la Falange fueron el apéndice purulento y el estómago agradecido de los grandes hijos de... Belcebú. No hay que meter en el mismo saco a todos los españoles, a Miguel de Unamuno que en el último tramo de su vida reconoció su inmenso error al contemplar espantado toda la vesania y el horror de la represión fascista, ni a Federico García Lorca, Miguel Hernández, Goya y Picasso, ni a Antonio Machado, León Felipe y Juan Ramón Jiménez.
Sé que Catalunya en su saber Ser, hacer y estar, en su cultura y humana inteligencia no caerá en las provocaciones de los Abascal, Ribera y Casado, no les responderá con la violencia, y les dejará a todos los fascistas, nacional imperialistas, en pelotas, en medio de la Calle Mayor. No olvides que en España, hay de todo, como en Cataluña, que no todos los españoles son una masa borreguil. Hoy, la España culta y solidaria, laboriosa y democrática, esta y saldrá a la calle para defender fraternalmente Cataluña y la Libertad de sus presos políticos
La cultura es la Paz y la Libertad, el Dialogo y la Fraternidad, de Manuel de Falla y Blas de Otero, Cernuda y Celaya, de Rosalía de Castro, Valle-Inclán y Castelao, de Ausias March, Pau Casals y Salvador Espriu el de La Pell de Brau. Que son Andalucía y Galicia, Euskadi y Catalunya, mi España bien amada con el cuerpo y el alma. Y no entraré en ninguna guerra de banderas ni de símbolos más o menos partidistas y manipulables. No entraré en las batallas de las tribus y los clanes, por un palmo más o menos de tierra, por un trozo de tela-bandera.
La poesía siempre estuvo y estará en Quevedo, Bécquer y Espronceda en el Amor que es respeto y humanidad, responsabilidad y solidaridad. Mi única bandera es la causa vital del género humano, la Tierra, y el futuro y la vida de los frutos de su vientre fértil y generoso.
El Espíritu del Caballero de la Triste Figura
Los ramilletes de flores y los versos, hablan
De los poetas y los amores que no mueren,
Y siguen cada año más vivos; Shakespeare
En Romeo y Julieta, los Amantes de Verona,
Y Cervantes en el Quijote y su Dulcinea.
Hijos de La Luz y la sombra, del Sueño de Amor
Que nació de una mente febril en los días sin fin,
Y las noches de la fría soledad a la Luz del candil
En la cárcel de Medrano de Argamasilla de Alba,
Bajo los ardientes rayos del Sol de La Mancha.
A la sombra de las Lagunas de Ruidera,
Y del embalse y El Castillo de Peñarroya.
Vuelve a renacer un espíritu indomable,
Y el Caballero de la Triste Figura, cabalga
De nuevo a Rocinante, la lluvia y el viento.
En la Proa del Titanic
La luna riela el mar
Mi mano te tiene
Por la cintura
En la noche fría.
La estrella Polar
Cabalgando el delfín
Besa y corta el viento
En la proa del Titanic.
Mi vida tuvo sentido,
Mi poesía cobró vida
El día que te conocí
En la ballena voladora.
Y sin saber quién eras
Te di Besa las Estrellas.
Luego ante tú humana
Inteligencia y belleza.
Me incline al entregarte
Mis sueños, amor y vida
Cantando a dúo contigo
La Canción del Pirata
En las Alas de la Mariposa Azul
No hay poder en la Tierra
Que iguale la imaginación.
Cierro mis ojos, y sueño,
Me dejo llevar en las alas
De la mariposa azul,
Y veo a mi niña correr
Por los campos de trigo
Con los cabellos al viento.
Ríe mi niña, y la mujer
Me sonríe y suspira
Al sentir la suave piel
De seda de mi amada,
Tendida sobre la yerba,
El aleteo de su alma
Extasiada, los besos
Y el guiño de la luna.
El gato negro sube
La escalera infinita.
Y el bebé elefante
Vive la vida soñada,
Sube y besa todas
Las estrellas del cielo
Volando en las alas
De la mariposa azul.
* La casa de mi tía agradece la gentileza de Olivier Herrera