UNIDAD DEL PUEBLO, felicita al pueblo de Cataluña, que ha salido en masa a votar y, con su determinación, ha desafiado y derrotado la brutal represión del Estado. Y también congratularnos de toda la solidaridad recibida del resto del Estado.

Parto de la base de que el “Procés Independentista Catalá”  expresa la voluntad de un amplio sector del pueblo catalán de acceder, democráticamente, a ser el arbitro de su propio destino y, la de un muy mayoritario sector -aproximado al 80%- del pueblo catalán que apoya decididamente su derecho a decidir en un  Referéndum su relación con el Estado Español.

Legítimo referéndum. El próximo domingo 1 de octubre de 2017 los catalanes y todos los demócratas estamos convocados a las urnas en un legítimo referéndum de autodeterminación convocado por la Generalitat, institución cuyo origen se remonta al año 1365 (por lo tanto antes de la existencia de España), referéndum que cumple con la legislación internacional suscrita por España, país que ocupa Catalunya injusta e ilegítimamente, referéndum al que se oponen los antidemócratas del PPSOE junto con el otro partido de la burguesía española, Ciudadanos (C’s), motivo por el cual han incrementado, vergonzosamente, las fuerzas de ocupación, principalmente la policía nacional, la guardia civil y el servicio secreto.

ECO REPUBLICANO reproduce este artículo que publica Salva Artacho en su página personal. Y yo, Chema Tante, declaro que Salva tiene mucha razón. Quienes se envuelven en la bandera imperial española para cacarear sobre legalidad y constitucionalidad, deberían entender que el levantamiento de la mayor parte de la población catalana se hace contra las urindades de estos partidos. Y si alguien me discute si es "la mayor parte" o no, lo que tiene que hacer es apoyar el referéndum, para aclarar de una ves esa cuestión.

"...a pesar de la intoxicación mediática y de la indefinida y ambigua actitud de la izquierda política española, los trabajadores y las trabajadoras de los distintos territorios del Estado, deberían entender que la Indómita Catalunya está abriendo una profunda grieta en el régimen caduco y que si hacemos fuerza y apoyamos su digna lucha, por esa brecha puede comenzar a asomarse un torrente de libertad y justicia capaz de barrer con la monarquía, la corrupción y las élites oligárquicas que nos oprimen, por eso y por compromiso solidario con el derecho inalienable de los pueblos a determinar su propio destino, hoy toca estar sin vacilaciones ni dobles discursos a favor del 1-O y decir alto y claro Visca Catalunya Lliure."

Si algo está claro en el follón catalán, más allá de las acusaciones que se hagan de una y otra parte, es que el pueblo catalán esta reclamado ser escuchado y que lo hace en paz. El artículo de Maria Dolores Amorós en NUEVA TRIBUNA  certifica esta realidad incontestable. Y lo que se comprueba es que la respuesta de los partidos nacionalistas imperiales españoles no puede ser más intolerante.

El Estado es el único que tiene derecho al uso legítimo de la violencia.  “Y si te saltas las leyes, eso tiene consecuencias judiciales”, insisten una y otra vez. Dichas consecuencias comienzan a hacerse visibles (claro que, como bien sabemos, en función de determinados intereses), y a partir de hoy, España va a ser protagonista de lo que muchas veces hemos denunciado: la ley no es el eje vertebrador de la democracia, si en algún valor o estamento hubiera de recaer esa acción, ésta debería ser en la justicia. 

UNIDAD DEL PUEBLO, manifiesta su total repulsa a la escalada represiva del gobierno del Partido Popular contra el pueblo de Catalunya partidario de celebrar un referéndum el próximo día 1 de Octubre, por el derecho a decidir.

Yo, Chema Tante, soberanista canario, creo que el profesor Vicenç Navarro tiene mucha razón en lo que dice en este artículo que señala Francisco Morote, de ATTAC Canarias, en PÚBLICO y en el sitio personal de autor. La aspiración soberanista, que debe culminar, es obvio, en la autodeterminación, no puede ni debe olvidar que la independencia no es un fin en sí mismo, sino un edio de liberación social de toda la población. De la misma manera que nadie debe olvidar que el nacionalismo bien entendido no es ni supremacista ni excluyente ni insolidario. 

A las puertas del 11-S y del 1-O, no parece como si no pasara nada.

Si que pasa, y es muy importante.