Ángel Rivero, desde su EN CANARIAS alza su voz en defensa de los derechos del pueblo saharaui por defender su libertad, sus recursos y su soberanía. Y acusa, con toda la razón, al estado español de desertar de sus deberes, como potencia todavía depositaria de la soberanía del territorio y como cómplice necesario del saqueo y la opresión perpetrada por el régimen déspota de Marruecos. Y no olvida Rivero dejar constancia de la relación muy directa que existe entre Canarias y el conflicto del Sahara con Marruecos.
Francisco Javier González escribe: "Pa'ese viaje pocas alforjas se necesitan. Solo un poco de sumisión, de afucharse y de continuar con la destrucción del territorio", al trasladar la portada del británico ESCAPE de este sábado, con algo que debe estremecernos a todas y todos. Con PCR o sin PCR, el coronavirus entrará en los gaznates de las hordas británicas, alemanas o nórdicas. Humanos, humanas y virus, libres como pájaros. Y todo, porque TUI y los empresarios canarios quieren seguir con su saqueo de los recursos canarios, y porque la gente de la política necesita sus refuerzos financieros, que la vida está muy cara. Nos están matando. y no les importa lo más mínimo. Una actitud criminal.
Julián Moreno y Daniel Albarracín en INFO LIBRE agarran el tema por donde hay que agarrarlo. Por su origen, que es lo que el neoliberalismo no quiere hacer. El artículo lo señala Domingo Méndez y yo, Chema tante resumo la cuestión con un principio de economía doméstica. Por eso digo que el neoliberalismo no quiere aceptar lo que es muy sencillo. En economía básica, la economía familiar, cuando no te alcanza el presupuesto, o bajas los gastos o subes los ingresos. Claro, cuando no puedes subir los ingresos, no tienes más remedio que apretarte el cinturón. Pero sería ridículo que teniendo dinero, o pudiendo ganar más, estés viviendo miserablemente. O, peor todavía, que hagas que una parte de la familia las pase canutas y pague las deudas, en tanto que la otra disfruta una vida opípara. Esto, esto precisamente, es lo que pretende el neoliberalismo. Que una parte de la gente, la mayoritaria, se cruja, cargada de deuda, en tanto que la otra vive mejor que el Bribón Juan Carlos. Y, como dicen Moreno y Albarración, la única manera es subir impuestos. Porque dinero, hay.