El genial Padylla, no solamente se consagra como el mejor paulinólogo, sino, además, como quien mejor describe su conocimiento del sujeto que tenemos la desgracia de padecer como presidente. Vean, pinchando, el desenlace de la espiral insufrible de promesas incumplidas de Paulino, que pinta Padylla en LA OPINIÓN.

"Si le doy de comer a los pobres, me dicen que soy un santo. Pero si pregunto por qué los pobres pasan hambre y están tan mal, me dicen que soy un comunista."  Hélder Câmara

Y sigue el circuito diabólico. Paulino, Brígida y compañía, impasibles, como si lo estuvieran haciendo todo estupendamente. Y los profesionales sanitarios, demostrando una y otra vez el desastre en la atención de salud, no achacable solamente a los recortes presupuestarios, sino también y en gran manera, a la estupide< que se aplica en la gestión.

Carlos García, traumatólogo y delegado de INTERSINDICAL CANARIA, detalla en este artículo la relación concreta de promesas incumplidas.