José Alberto Novoa en NUEVA TRIBUNA apoya el proyecto de Yolanda Díaz. Lo señala el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado
Pedro Delgado, en TAMAIMOS, tiene una tonga de preguntas que hacer sobre esa patujada parida desde el ayuntamiento de Gáldar, pero apoyada por la Consejera de Turismo (y de Industria y Comercio, pero ella no se entera) Yaiza Casimira McDonalds, a la que le gusta una godada más que una hamburguesa, que ya es decir, en su caso. Y yo, Chema Tante, me quedo privado con este texto de Delgado, por su fondo y por su forma. Por su fondo, porque da coraje ver a esta insalla de la política desagallada siempre por las cosas de pa'fuera de las islas. Y por la forma, porque resulta tan difícil como grato ver que alguien defiende nuestra habla canarias. Lo poco que nos va quedando. Y es que da mucha magua que uno no pueda expresarse con las palabras que aprendió de su abuela, porque ya no lo entiende nadie.
Entrevista de EUROPA PRESS a Castells, ministro de Univer4sidades. Lo difunde/ PÚBLICO. Y yo, Chema Tante, le digo a Castells que tiene mucha razón. Pero que lo que dice ya era aplicable antes de internet, desde que han existido los libros. Porque también tenía razón yo, hace muchos, muchos años, cuando le decía a las bestias jesuíticas preconciliares eso mismo. Que para qué tenía que aprenderme de memoria yo algo que ya estaba a mi alcance al abrir un libro. Que lo que necesitaba yo era que me enseñaran a buscar la información y a manejarla, a razonarla. Ese ha sido el mal supremo de la educación en el Imperio Español durante siglos. Han obligado a meterse en la cabeza el conocimiento, al pie de la letra. Había que repetirlo exactamente igual a lo que aparecía en el texto. No permiten a la gente ni decirlo con sus propias palabras. Y anatema contra quien osara discutir algún concepto, por razonable que fuera. Han formado centenares de generaciones de loros, incapaces de razonar. Y esos loros y loras siguen gobernando y dirigiendo empresas, con sus flamantes títulos colgados de la pared, pero si un cerebro que piense.