Uno, son dos, pero complementarios e inseparables, artículo de Antonio Turiel en THE OIL CRASH, que recomienda Federico Aguilera Klink. Y yo, Chema Tante, agrego que aunque, como bien dice el autor, la lectura es un poco árida, es preciso hacerla, porque contiene varios elementos de reflexión sobre la coyuntura covid-19. Esta segunda parte -y las que quedan- de la dichosa pandemia saca a la luz más miserias de las que infectan esta sociedad. Destacaré dos, que ya yo he apuntado varias veces: Uno que, aunque el ataque del coronavirus no haya sido provocado, es obvio que está siendo alevosamente aprovechado por quienes siempre están prestos a arrimar la candela a su cochino y dos, que la oligarquía neoliberal ya ha hecho sus números y ha comprobado que la covid-19, que seguirá y seguirá por un tiempo imposible de establecer, puede tener para sus economías un efecto paradójicamente salutífero: Ofrece buenas oportunidades de negocio y proporciona un drenaje de población que al capitalismo siempre le viene bien. Será duro, pero es la realidad. Es lo que explica el empeño en seguir, como dice Turiel con el BAU (business as usual) muera cuanta gente muera, se enferme y sufra cuanta gente enferme y sufra, especialmente, porque la gente rica tiene menos problemas con esto. Siempre habrá respiradores y paliativos disponibles en la sanidad privada.

Perry Anderson

"Nada de cantos para celebrar el sesenta aniversario del Tratado de Roma y del mercado común el 25 de marzo. El estandarte europeo ha perdido su esplendor, pues las políticas de la Unión Europea han resultado ser desastrosas."

Francisco Morote, de ATTAC Canarias recomienda eset agudo, clarividente artículo de Perry Anderson que ofrece GRADUATS y que apareció en cerrado en  LE MONDE DIPLOMATIQUE EN ESPAÑOL. Anderson atina, efectivamente, sobre lo que está pasando en las reacciones contra este sistema abrumador, que vienen de la derecha y de la izquierda. La cuestión parte de la realidad de que el neoliberalismo ha abandonado la tesis antipúblicas tradicionales de la derecha. El neoliberalismo no está contra lo público. Lo que ha hecho ha sido apropiarse del aparato público, para beneficiar los intereses de las grandes empresas, del capital, al fina de la historia. Por eso la derecha radical salta contra el sistema. Por eso ocurrió el Brexit y ocurrió la entronización de Trump, que es la versión USA del Brexit. Y Anderson, con una argumentación impecable, concluye en que la acción antisistema de la izquierda solamente podrá neutralizar a la extrema derecha si asume la contundencia contra el sistema, en Europa, implantado por unos gobiernos que han traicionado el ideal solidario y pacifista de la Unión.

Lo que cuenta el sociólogo peruano Enrique Muñoz Gamarra, en su blog personal y en KAOS EN LA RED, en artículo recomendado por VK, no es precisamente motivo de satisfacción, porque el fracaso del Pentágono y e las políticas intervencionistas en Siria, anticipa una nueva escalada de violencia que acentuará la tragedia de aquel pueblo. Aunque Muñoz Gamarra concluya su reflexión con un apunte optimista. Ojalá.