MIENTRAS TANTO publica este estupendo texto de Joaquim Sempere que recomienda Julián Ayala. El texto corresponde a una intervención de Sempere en un debate con Andreu Mas-Colell, Y yo, Chema Tante, tengo que insistir en que esto de defender el decrecimiento, en estos momentos parace tan obvio que lo contrario llega a resultar criminal. Por eso, cuando veo a energúmenos diciendo, incluso desde la Universidad, que "con renovables se garantiza la economía y la defensa del ambiente, al mismo tiempo" y que "es preciso mantener el crecimiento en la generación y consumo de energía, para obtener la felicidad general", sencillamente, me exaspero.
Juan Torres, entrevistado en RADIO CABLE, por la aparición de su nuevo libro ECONOFAKES, no pierde la oportunidad de denunciar las maldades neoliberales
Los Autónomos/as canarios han respondido de manera ejemplar en los datos de afiliación al RETA, llegando en septiembre de 2021 a 132.493 afiliados, exactamente 762 más que en el mes de agosto
Juan Torres lleva años en la hasta ahora infructuosa lucha por hacer ver la tremenda maldad de los mecanismos de Deuda pública. Aquí, en este artículo muy completo y arGumentado en NUEVA TRIBUNA, vuelve el hombre a la carga y es algo muy de agradecer. Sin emargo, yo Chema tante, repetiré que esto es un problema que solamente podrá empezar a solventarse cuando la ciudadanía entienda la necesidad de levantarse. La Deuda seguirá, por la razón que Torres reucerda a cada momento. La Deuda pública de los estados es un colosal negocio de la estafadora banca y un resorte de chantaje neoliberal para mantener la sumisión de los gobiernos. Esa es la cuestión y eso es lo que la gente tiene que entender. Por eso, una vez aliviado el espanto que generó en un primer momento la pandemia, las execrables oligarquías han retomado su estrategia. Todo el dinero que haga falta para la reconstrucción, sí. Pero en forma de Deuda, para que nada cambie.
Adrián Francisco Varela nos cuenta en BUSINESS INSIDER que esta tipa, La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, larga ahora lo que ha sido siempre el caballo de batalla de la resistencia al neoliberalismo. Yo, Chema Tante, digo que tiene gracia que después de años de cachetearnos y llamarnos torpes ignorantes, por decir lo que se cae por su propia lógica, vengan ahora a desmentir sus propias falacias. Pues ya lo saben, gobiernos de todos los colores; hay que escachar fiscalmente a las grandes empresas y fortunas. Ya no es una barbaridad ignorante decirlo. Y ojo a la boya: la señora Georgieva, que tan Kristalina-mente se ha expresado, no es cualquier cosa. Aunque economista búlgara, y nada tengo contra la formación económica búlgara, pero puede ser sospechosa, por sus antecedentes recientes, esta señora se formó en finanzas en Harvard, y ha sido candidata a las primeras posiciones en la constelación económica capitalista. Con sus ideas, no me extraña que nunca pasara de candidata, hasta ahora que, desde el FMI, dice cosas, sigan leyendo la crónica de Varel que le permitirían sin desdoro apuntarse a Unidas Podemos. Y que se sepa: Yo, Chema Tante, sin echármelas de méritos académicos, vengo diciendo lo mismito que la doctora Gueorguieva desde hace muchos años y proclamando que quienes sostienen lo contrario, eso de que los impuestos a la gente rica entorpecen la economía, son unos lerdos friedmanianos al servicio del neoliberalismo. Y pondré como ejemplo al genuflexo Clavijo, economista mentecato.
Muy instructivo trabajo en la web de CELAG y en NUEVA TRIBUNA, que señala y comenta Carlos García. Un informe en el que Nicolás Oliva, con datos objetivos demuestra que no existen fórulas mágicas (como pretenden los mendaces neoliberales, añado yo, Chema Tante) para acomodar las economías de los países. Panamá, al arrullo de USA y Cuba, contra la agresión USA, encabezan el desarrollo latinoamericano en las dos décadas pasadas., (¡Cuba! Sí. Cuba). De todas maneras, con el debido respeto, yo le diré al prestigioso investigador Oliva que no hay fórmulas mágicas para conseguir el desarrollo y , pero sí las hay para conseguir la desigualdad y el sufrimiento, son las políticas neoliberales. En cambio, si se permite a los países elegir en paz a sus gobernantes y se permite después a estos gobernantes gestionar sin intromisiones neocoloniales de USA o de Europa o de dónde sean, estableciendo políticas fiscales equitativas y desarrollando inversiones públicas y sociales, el desarrollo llegará con rapidez. Y lo que es mejor: el desarrollo con igualdad y justicia. Es lo que Oliva llama "receta monolítica impuesta desde el Norte." y yo llamo por su nombre: intromisión neoliberal.