puede suponer que las ayudas no empiecen a recibirse, si es que llegan a hacerlo, hasta 2022
Juan Torres en PÚBLICO da la señal de alarma sobre algo que la gente, las personas y la de la política, que son otra cosa, no han asumido. Las perras de Europa están todavía en veremos y la propia Unión Europea puede estallar en cualquier momento. Yo, Chema Tante, tengo que insistir en que esta Unión de los mercaderes enloquecidos no es la que nos vendieron y, por tanto, lo arreglamos, o nos mandamos a mudar. Entre tanto, como yo escribo desde Canarias, digo que me gustaría ver la carita de tipos como Ángel Víctor, Román, Casimiro o Julio Pérez, sabiendo que la pasta europea, norte y final de sus desvelos, no llegará con la facilidad que ellos creen y confiían. Tiemblen y lloren.