Magistral lección de un guanche a otro guanche -por El Padre Báez
Aunque ambos eran de la misma condición, nobles, por razones de tierras y posesiones, uno era más pobre que el otro, y no por el vicio de robar, sino para poder comer, iba por donde los rebaños y se buscaba el baifo para su comida, y aunque era público y notorio, nadie -dada su condición de hombre importante y con cargo- más que permitírselo lo soportaban, pero no con agrado, como se puede comprender.