Ramón Suárez Jiménez hace estas interesantes propuestas, desde LA VOZ DE LANZAROTE
Quien haya vivido su adolescencia en estas islas, seguro que habrá sido testigos en alguna ocasión del fenómeno de aquellos que, sin confrontar directamente en la misma, enardecen a los posibles contendientes con unas expresiones inequívocas: “¡Tain! Lo que te dijo” o “¿Tú te dejas decir eso? Chos, yo no me dejaría”. Luego, seguramente habrán visto una figura aún peor: los que, presentándose como pacificadores, haciendo que separan, aprovechan para pegar la patada a uno de los contendientes. Obviamente, no son mediadores: actúan de parte.
Pere Ríos y su obra
Álvaro Felipe Hernández recomienda este post de LA LAMENTABLE, en el que Carlos Jiménez Villarejo glosa la obra de Pere Ríos La factura de la corrupción pública y privada (Editorial RBA). Otro de los testimonios del escandaloso drenaje de fondos pùblicos, por todo el planeta, que es, con la depredación empresarial y la evasión fiscal, los causantes de los intolerables sufrimientos de tanta gente. Ese dinero que se maman las canallas legiones de la corrupción es el dinero que podría solventar las carencias sanitarias, alimentarias, educativas y sociales de las masas famélicas del mundo.
"Con el caso El Trompo y con todo el resto de casos similares, de los que hay multitud en Canarias, se abre de nuevo la cuestión fundamental: ¿por qué favorece el favorecedor? Se condena a este trío delincuente por prevaricación y por saltarse la ordenación del territorio, pero los tribunales, con esta sentencia y como de costumbre, se quedan a la mitad. Porque lo esencial, en estos asuntos, es el móvil, la causa de las actuaciones. Es obvio que el constructor hace negocio. Pero el alcalde y el funcionario que conceden el favor, o lo hacen por ser pollabobas, o se llevan su parte correspondiente. Y esto es cohecho."
Interesante y didáctica reflexión de Rubén Jiménez sobre el proceso de aculturación, anexo a la pérdida de identidad y a la desubicación mental geográfica que sufrimos en Canarias. La dominación goda llega a conseguir que perdamos la conciencia de en qué lugar del mapa se encuentran nuestras islas: "conocemos como “países del este” no a Marruecos, Argelia o Libia, sino a los que la brújula sitúa en el norte"
La persecución de la “caverna mediática” a Podemos no tiene parangón: se trata de que cualquier propuesta que haga este grupo político, no sólo sea criticado –función loable que justifica la existencia de medios de comunicación plurales-, sino que, sea vilipendiado y calumniado –algo que ya choca con delitos de injurias y calumnias que se recoge en nuestro Código Penal y el código deontológico de la profesión periodística-, aunque sea faltando descaradamente a la verdad: algo que, directamente, contradice el derecho a libertad de información garantizado en nuestra Constitución, el derecho a una “información veraz”.
La respuesta de Vicenç Navarro a su amigo Carlos Jiménez Villarejo, al que dice estimar, y bastante bien que ello me parece, en relación con las críticas del fiscal emérito a Podemos, es en realidad una respuesta muy sólida a tanta gente que profesa el mismo criterio de cuestionamiento. El artículo lo leo en PÚBLICO por recomendación de Antonio Aguado.