Francisco Morote, de ATTAC Canarias, señala esta publicación en la que TERCERA INFORMACIÓN y SIN PERMISO ofrecen el texto de la presentación que hiciera Sergi Raventó, trabajador de Fundació Els Tres Turons, de salud mental, realizó en el VII Congreso Internacional de Bioética que tuvo lugar en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Barcelona los 24 y 25 de noviembre. El título de la propia presentación es el mejor resumen de su contenido.
La diputada de Podemos y presidenta de la Comisión de Discapacidad del Parlamento de Canarias, Natividad Arnáiz, reclamó hoy un plan de Salud Mental que atienda a las más de 190.000 personas que padecen alguna de estas patologías en las Islas, y que lo haga desde un enfoque integral, no solo desde una visión meramente psiquiátrica.
El autodefinido "Superviviente del Sistema de Salud Mental" Fernando Alonso publica en la página de la Asociación Madrileña de Salud Mental este muy clarito artículo que recomienda y comenta mi amiga invisible.
Lo describe muy bien Padylla en LA OPINIÓN, en viñeta que les invito a ver completa. Cuando alguien funciona metalmente, no en función de las ideas y de los hechos, sino de los propios intereses, económicos y políticos, termina por desbarrar. La estrategia del partido llamado popular se estampa contra la cruda realidad de que la gente ya no se cree la matraquilla de la recuperación, Y, como se acercan la elecciones con la terrorífica posibilidad de perderlas, tiran por la calle de enmedio, intentando aumentar el ingreso. Bajan los impuestos, dicen. Pero, de nuevo, mienten. O peor, como dice el topico, solamente dicen media verdad.
Lee la declaración de Atocha, en defensa de la atención pública a la salud mental. Y, si estás de acuerdo, únete a la petición.
Benicio Alonso: la calculadora desplaza al cerebro. Las barbaridades de ETA provocaron muchas muertes y dolorosas mutilaciones. Pero la codicia pepera produce el necrosamiento de parte o todo el cerebro. El caso de Benicio Alonso debería ser onjeto de estudio e investigación en las facultades de medicina. Pero no como un caso aislado, sino como el paradigma de adonde puede llevar el descerebramiento que supone colocar una calculadora en la cabeza y una cartera en el alma.