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miércoles, 15 de mayo de 2024 16:14h.
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Sociedad

Hay que regular el turismo antes que sea demasiado tarde (Roberto Savio)

 

 

FRASE SAVIO

El problema de contaminación que causa la saturación turística es algo que preocupa -a la gente sensata- por todo el mundo, como demuestra este lúcido artículo de Roberto Savio que señala en ALAINET o TERCERA INFORMACIÓN, Francisco Morote, de Attac Canarias. Un problema que se agudiza cuando se trata de un destino frágil ambientalmente y, sobre todo, muy alejado de los puntos de origen de visitantes, como es Canarias. En Canarias, como en Hawai o las Seychelles, se impone la contingentación turística, por mucho que les pese a los toletes y las toletas que dirigen las empresas y el gobierno, que solamente son capaces de hacer negocios a lo bestia. Lo que dice Savio es contundente. Y la regulación que demanda no se limita solamente al número, sino a los componentes culturales y sociales.

Sociedad

Para que el futuro sea de nuevo posible (Boaventura de Sousa Santos)

 

 

NEOLIBERALISMODAESH

BOAVENTURA DE SOUSA SANTOSNotable artículo de Boaventira de Sousa Santos en OTHER NEWS, en la página de ATTAC, en PÙBLICO y en ALAINET., en traducción de  Antoni Aguiló y José Luis Exeni Rodríguez  Boaventura alerta y señala cuáles son los dos brutales enemigos actiuales de la Humanidad: Son el neoliberalismo y DAESH. Son los dos fundamentalismos que, aunque parezca diferentes "incuso antogónicos", "comparten características muy importantes". "Ambos se basan en verdades absolutas que no toleran la disidencia política, ya sea la fe científica en la prioridad de los intereses de los inversores y en la legitimidad de la acumulación infinita de riqueza que ésta permite, ya sea la fe religiosa en la doctrina del califa que promete la liberación de la dominación y humillación occidentales." Y yo, Chema Tante, agrego que también coinciden ambas doctrinas en las funestas consecuencias de su aplicación. Allá donde operan las brutalidades del neoliberalismo (el fascismo del siglo XXI) o del DAESH, la desigualdad, la injusticia, la opresión, la enfermedad, la incultura, el hambre y la muerte afligen a las gentes. Siguiendo a sus dioses respectivos, el dinero o un alá inventado, ambas fuerzas conducen al planeta a la catástrofe. Y Buenaventura ofrece la solución, que, sin embargo, promete ampliar en una próxima entrega (habrá que estar pendiente). Esa solución, que, veamos, es la misma de siempre es: democratizar la revolución y revolucionar la democracia.