Esperanza Aguirre y sus malas prácticas educativas en Madrid y en el mundo.

 Mientras las y los españoles estaban – y siguen estando – duramente sometidos a la llamada “crisis”, una estafa planificada por el capitalismo para hacer lo que mejor saben hacer: enriquecerse, saqueando a los pueblos, el Vicesecretario General de Nuevas Generaciones y Consejero Técnico del Ayuntamiento de Madrid, Ángel Carromero, viajaba a Cuba. ¿Para organizar y financiar a la derecha cubana?

 Esto sólo sería una más de las muchas y oscuras relaciones del PP con la derecha de América Latina: Visita de Carmona a España, en 2002,  una semana antes del golpe de estado contra el gobierno de Chávez elegido democráticamente; golpe de estado de Carmona, finalmente legitimado por Aznar, con el apoyo explícito del embajador español; apoyo y defensa del gobierno de Uribe, relacionado con el narcotráfico y los asesinatos de sindicalistas; apoyo al golpe de estado en Honduras contra el presidente Zelaya. Como sus injerencias neocolonialistas en países soberanos son ya muy evidentes, el PP tiene que confiar estas “misiones libertadoras” en los países que debe considerar todavía sus “virreinatos”, a sus jóvenes, más desconocidos, y que pasan más desapercibidos. Pero el PP se equivocó, obviando reiteradas actitudes irresponsables del Vicesecretario General de Nuevas Generaciones y un mortal accidente de tráfico dejó en evidencia una de las misiones “secretas” del PP, en Cuba.

 Y lo que nos faltaba, ya, en esta historia, es que Esperanza Aguirre, nos venga, ahora, como abanderada de la democracia. Si ella cree que hemos olvidado que ella pertenece a una familia con procuradores, de muchas legislaturas, en las cortes franquistas y a un partido fundado por ministros del gobierno fascista de Franco, que sepa que muchas y muchos no estamos dispuestos a olvidarlo y aún menos, a que  venga a darnos lecciones de democracia. Eso sí que NO. Rotundamente, NO.

 Tampoco olvidamos nuestro NO a la guerra de Irak (2003), en la que el gobierno del PP jugó también el papel de “democratizador y pacificador” que acabaría con las armas de destrucción masiva (finalmente, inexistentes) y devolvería la libertad y los derechos al pueblo iraquí. Desde los inicios de la ocupación, dejaron las ciudades iraquíes abiertas al saqueo y a la quema, destruyendo todos sus ministerios, incluidos los de Educación, Sanidad, Cultura, protegiendo únicamente al Ministerio de Petróleo. Han sido diez años de robos, saqueo de los hospitales, secuestros, asesinatos, encarcelamientos masivos, sin acusación y sin derecho a la defensa en los tribunales, en interrogatorios humillantes por parte de las tropas. Es la pretendida acción “civilizadora” en los  fértiles valles del Éufrates y del Tigris donde hace unos 5.500 años, en las ciudades fortificadas de Uruk y Ur, nació el “estado”. Pero, todo esto no le importa a los “democratizadores y civilizadores”, como Aznar y Aguirre. Lo que les importa son los intereses económicos y estratégicos. El negocio privado.

 Que la derecha no nos venga con más cuentos para injerencias en países soberanos, directos o indirectos, como el de las “armas de destrucción masiva” en Irak, los “guerrilleros de la libertad” contra el gobierno comunista de Afganistán, “guerrilleros de la libertad” que resultaron ser los actuales talibanes, o el de la “Primavera” Árabe que destroza países enteros, con insurgentes fuertemente armados, financiados por las monarquías y emiratos feudales, al servicio de los Estados Unidos, con los resultados que finalmente vimos en Egipto o con el cuento de las armas nucleares en Irán, cuando EEUU ha sido el único país del mundo que ha utilizado armas nucleares contra personas inocentes, en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.

 Esperanza Aguirre que ha sido, y sigue siendo, un azote, en la Comunidad de Madrid, contra la Educación pública, contra la Sanidad pública, contra todos los Servicios Públicos, es corresponsable política de los efectos de la invasión exterior sobre el sistema educativo de Irak que, según la ONU, han sido devastadores.  El 1º de octubre del  año de la invasión – 2003 -, dieron comienzo las clases en la enseñanza primaria y secundaria para casi seis millones de alumnos. A finales del mismo mes, la Autoridad ordenaba el cierre indefinido debido al clima de violencia generalizada, de operaciones militares y explosiones de coches bombas en el camino de la escuela. La falta de orden público y el deterioro del nivel de vida hacen que la población apenas pueda pensar más allá de cómo sobrevivir en el día a día. Ahora, las potencias extranjeras ocupantes trabajan para privatizar el sistema educativo, confiando su reconstrucción a  la empresa estadounidense Creative Associates. Sin embargo, la sociedad iraquí está acostumbrada a recibir enseñanza gratuita desde el nivel primario hasta el universitario, con un porcentaje de escolarización cercano al cien por cien y una Enseñanza superior, especialmente los centros tecnológicos y científicos, de categoría internacional que contaban con personal de alta preparación. Ud., Esperanza Aguirre, contribuyó a destrozarlo, con su política “democratizadora”.

 Cuba está sometida a un bloqueo económico que Estados Unidos persiste en mantener  desde hace 50 años, a pesar de ser contrario al derecho internacional, de ser condenado reiteradamente por la ONU, de causar daños, provocando sufrimientos y violando los derechos humanos de todo un pueblo. En Irak, las sanciones económicas provocaron la muerte de medio millón de niños. En Cuba, a pesar de las dificultades económicas en la vida diaria, han conseguido que la tasa de mortalidad infantil esté por debajo de la de EEUU y Canadá, gracias al Sistema Nacional de Salud accesible y gratuito para todos los ciudadanos, y al desarrollo educacional. Y eso es un logro admirable en una Isla de poco más de 11 millones de habitantes castigada por un prolongado, injusto e ilegal embargo económico.

 Desde el triunfo de la Revolución en 1959, el desarrollo de la medicina ha sido la gran prioridad del gobierno cubano, que ha transformado a Cuba en una referencia mundial en este campo. Cuba cuenta con el mayor número de médicos por habitante y en 2012, formó más de 11.000 nuevos doctores, en sus facultades de medicina reconocidas por la excelencia de sus enseñanzas. Se trata de la mayor promoción médica de la historia del país, que ha hecho del desarrollo de la medicina y del bienestar social las prioridades nacionales. Entre estos médicos recién graduados, 5.315 son cubanos y 5.694 proceden de 59 países de América Latina, África, Asia e incluso de Estados Unidos. Así, en un año, Cuba formó casi el doble de médicos que la cifra total de la que disponía en 1959. Esto es lo que no le debe gustar de Cuba a Esperanza Aguirre que quiere hacer de la Sanidad pública un negocio privado.

 En cuanto a la Educación, la UNESCO elogió la calidad de la educación en Cuba, mencionando que la Isla ostenta el lugar 16 entre 120 naciones en el Índice de Desarrollo de la Educación para Todos (EPT). Cuba es líder en la región de Latinoamérica y el Caribe en la referida lista, encabezada por Japón, Suecia, Noruega y Reino Unido. Incluso aventaja a Estados Unidos, que está en el puesto 25. Esto tampoco le debe gustar de Cuba a Esperanza Aguirre que quiere hacer de la Educación pública un negocio privado.

 Esperanza Aguirre presume, en todas sus biografías, de sus títulos de nobleza, de ser hija de los condes de Sepúlveda y condesa consorte de Murillo y grande de España. Todos esos títulos nobiliarios, inútiles y pretenciosos en pleno siglo XXI, se les ha debido subir a la cabeza y por eso, desde su imaginaria corte versallesca, con una actitud dominante, desprecia al pueblo que se manifiesta reclamando sus derechos, como si fuera María Antonieta, ante el pueblo que protestaba contra el aumento del precio del pan: “Si no tienen pan, que coman bollos”.

 Esperanza Aguirre debería reflexionar sobre como terminó esta historia, la de María Antonieta, me refiero, y también sobre su contribución política a la situación de la sanidad y la educación en Irak, después de la intervención extranjera que ella compartió, y también sobre el artículo de Masozi, del Instituto de Estudios Políticos, publicado solamente por Inter Press Service, el 27 de febrero 2012, y rescatada por Proyecto Censurado como la 20ª noticia más censurada en el anuario Censored 2013 y que se titula “La destrucción de la Educación Pública alimenta el Complejo Industrial de Prisiones”, para que piense en lo que están haciendo, ella y el PP, con la Educación Pública en Madrid, en particular, y en España, en general.

 Finalmente, y sobre el episodio del accidente de tráfico en Cuba del Vicesecretario General de Nuevas Generaciones, Carromero, que acabó con la muerte de dos personas, Esperanza Aguirre también debería reflexionar sobre su forma de promover la irresponsabilidad social en los jóvenes del PP, y otros jóvenes, debido a la trascendencia pública de este asunto.

 Existen factores de riesgo y factores de protección para un buen comportamiento social. La impulsividad, es decir la dificultad de insertar la reflexión  y el análisis entre el impulso y la acción, la búsqueda de estímulos y sensaciones, la atribución de la propia conducta a factores externos fuera del control personal (locus de control externo), el pensamiento egocéntrico que puede llevar a no comprender las normas sociales, son factores de riesgo. El control personal (locus interno de control) para influir en los acontecimientos de la propia vida, asumir riesgos moderados, asumir las responsabilidades sobre sus propias acciones y sus consecuencias, son factores de protección que ayudan a desarrollar la competencia personal y social de las personas.

 En lugar de ayudar a Carromero a reflexionar sobre su comportamiento en la carretera (conducción a alta velocidad en contra de las normas de circulación), que ya lo llevó a la retirada del carnet de conducir en España y a un trágico accidente de tráfico en Cuba que acabó con la muerte de dos personas, Ud., Señora Aguirre, se dedica a alentar este tipo de conducta de riesgo personal y social, acusando a factores externos, en este caso al Gobierno de Cuba. Eso es hacerle un flaco favor a este joven, y consentir y promover la irresponsabilidad social entre los jóvenes del PP.

 No lo haga para hacer ver que abandera la democracia. Ya nadie se lo cree. Ni educadores, ni padres, ni estudiantes, ni médicos, ni pacientes, ni trabajadores del metro, ni trabajadores de otros sectores, ellos a los que Ud. y los suyos acusan de defender “privilegios”, cuando reclaman derechos laborales y sociales, y un reparto más equitativo de la riqueza.  Los únicos que gozan de privilegios, en su modelo de sociedad, son los capitalistas que, con su ayuda y la de los suyos, están acumulando dinero, de forma  masiva y despiadada, en detrimento de pueblo. Señora Condesa.

 María Puig Barrios

Secretaria General