NC muestra su indignación por la respuesta del PP municipal a los incidentes entre la Policía Nacional y los vecinos de Cruz de Piedra y Las Rehoyas

Pedro Quevedo exige al alcalde la convocatoria de la Junta de Seguridad para poner fin a los supuestos excesos del cuerpo de seguridad estatal

Nueva Canarias (NC) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha mostrado hoy su indignación por la respuesta municipal a los incidentes entre la Policía Nacional y los vecinos de Cruz de Piedra y las Rehoyas. El portavoz municipal de NC, Pedro Quevedo, ha exigido al alcalde del PP, Juan José Cardona, la convocatoria de la Junta de Seguridad para poner fin a los supuestos excesos del cuerpo de seguridad estatal.

El pasado mes de octubre, Nueva Canarias  solicitó información al grupo de gobierno  para conocer las acciones que se estaban llevando a cabo en relación a los incidentes que, desde el verano, han tenido lugar en la capital entre la Policía Nacional y algunos vecinos, los más destacados los ocurridos en Cruz de Piedra y Las Rehoyas, donde hubo disparos y supuestas agresiones.

Estos incidentes, en opinión de Nueva Canarias, son de la “suficiente gravedad” como para que Cardona tome cartas en el asunto y, como mínimo, convoque la Junta de Seguridad, órgano compuesto por los mandos de los cuerpos y fuerzas de seguridad que operan en la capital y sus responsables políticos. No se trata de hechos aislados, según Quevedo, ya que se han producido en un corto espacio de tiempo y tuvieron como protagonistas a multitud de vecinos.

La respuesta del PP ante “nuestro requerimiento roza el insulto y pone en evidencia la falta de transparencia de la que hace gala” el PP, en opinión del portavoz municipal de NC, “muy al contrario de lo que pregonan”. Las respuestas a base de monosílabos ante las preguntas formuladas sólo pueden provocar “indignación y demuestran una falta de interés total” en la resolución de estos conflictos, según Quevedo.

Las situaciones de pobreza, desempleo y exclusión que se están viviendo en nuestros barrios, en donde en algunos de ellos se roza el 70% de paro, requiere un análisis y un tratamiento “inteligente y adecuado, que no puede ser a base de represión policial”, advirtió el concejal nacionalista. El “temido estallido social” del que se suele hablar, agregó, no se puede resolver a base de represión pues eso “sólo traerá consecuencias negativas y no deseadas”, según Quevedo.

“De la máxima gravedad nos parece” el comunicado del Sindicato Profesional de la Policía, organización que representa a la mayoría de los mandos policiales, en el que ante estos hechos se hacen afirmaciones tales como que “enfrentarse con la Policía, sólo les traerá tragedia y desgracia a los vecinos”. Desde NC, “no creemos que esta sea la forma en la que deben proceder los servidores públicos y entendemos que no es el sentir” de la mayoría de los policías.

La falta de diligencia de Cardona ante este asunto, para Quevedo, sólo contribuye al alejamiento de los ciudadanos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, ya que “al no aclarar los hechos se extiende una mancha, posiblemente injusta, sobre unos profesionales que, en su mayoría, actúan de manera correcta y al servicio de la ciudadanía a la que deben proteger”.

“Por eso reclamamos a Cardona que convoque, con carácter de urgencia,” anunció el portavoz municipal de NC, la Junta de Seguridad para analizar los hechos y exigir las responsabilidades pertinentes, si finalmente se demostrase que ha habido algún exceso en las actuaciones policiales indicadas.